Una tarjeta con consejos como «tienes derecho a guardar silencio» o «quiero llamar a mi abogado» puede hacer la diferencia en la forma en que un indocumentado enfrente el plan de deportaciones masivas que ha prometido implementar el presidente electo estadounidense, Donald Trump.
La pequeña tarjeta ha recobrado su vigencia en la estrategia que grupos proinmigrantes están promoviendo, después de utilizarla con éxito en la anterior administración de Trump (2017-2021) para educar a los indocumentados sobre sus derechos y cómo “desafiar las deportaciones”.
“Los inmigrantes (indocumentados) tienen derechos, humanos y civiles, y eso es lo que se debe tener en mente”, dijo en una conferencia de prensa Arelí Hernández, de la Coalición por los Derechos Humanos del Inmigrante en Los Ángeles (CHIRLA).
En inglés y en español, el mensaje de la tarjeta advierte que la persona que la presenta apela a su “derecho constitucional de guardar silencio” y de no contestar ninguna pregunta que se le haga.
Además, pide que se le permita al inmigrante contactar a un abogado o a una organización comunitaria en específico.
Francisco Moreno, representante del Consejo de Federaciones Mexicanas en Norteamérica (COFEM), contó a EFE que las diferentes sedes han comenzado a recibir numerosas llamadas de inmigrantes que buscan asesoría y solicitan la tarjeta y una lista de consejos sobre qué hacer “si la migra golpea a tu puerta”.
“Son pasos muy sencillos pero que pueden hacer la diferencia, especialmente los ayuda a no dejarse llevar por la desesperación”, ahonda el activista.
De color rojo o con una franja roja, la tarjeta laminada debe llevarse a todas partes junto con los documentos de identificación, recomiendan las organizaciones a los inmigrantes.
“También es un mensaje para las autoridades de inmigración de que el indocumentado no está solo en su lucha”, subraya Moreno, que alienta a los extranjeros a buscar en las organizaciones dicha tarjeta.
Trump ha dicho que su objetivo es deportar a millones. En 2022 había unos 11 millones de indocumentados, y entre enero de 2023 y abril de 2024, se liberó a otros 2,3 millones de inmigrantes sujetos a deportación y también objeto de cualquier operativo, según datos del American Immigration Council.
Educando a los más pequeños
Ante esta situación, COFEM también tiene entre sus objetivos educar a los estudiantes del Distrito Unificado Escolar de Los Ángeles (LAUSD), con el que está estrechando lazos para ofrecer conferencias en las escuelas que lo soliciten.
«Debemos incluir a los menores dentro de nuestros planes y también es importante enseñarles sobre el reto a que se enfrentan», indicó Moreno.
Además, se está recomendando a los padres que hagan planes en caso de una eventual detención o deportación sobre quién es la persona designada para asumir el cuidado de sus hijos, y dejar un número de emergencia alternativo en las escuelas de los menores.
“Si estamos preparados podemos enfrentar mejor este reto”, insiste el activista.
La respuesta “rápida”
Las organizaciones en California destacaron en el anterior Gobierno de Trump por responder de manera casi “inmediata” con los grupos llamados de “respuesta rápida” a los operativos realizados por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, en inglés).
Guillermo Torres, director de políticas migratorias de Clérigos y Laicos Unidos por una Justicia Económica (CLUE), organización religiosa que lideró la estrategia de la “respuesta rápida” en el pasado, dijo a EFE que estudian cómo revivir estos grupos y aplicar la experiencia aprendida en el pasado.
Además de desplegar toda una red para informar sobre la presencia del ICE en los vecindarios, la iniciativa busca que líderes religiosos estén presentes en el momento de la detención para vigilar que no se cometan atropellos.
CLUE ha convocado a numerosas iglesias de diferentes denominaciones religiosas para que “no se queden callados y salgan en defensa de los desprotegidos y abracen a los inmigrantes», recalcó Torres.
En ese sentido, Hernández destacó que las estrategias de “resistencia” desarrolladas en California se convirtieron en un ejemplo en todo el país cuando lograron detener un buen número de deportaciones entre 2017 y 2021.
Y es que los activistas incluso lograron parar la expulsión de inmigrantes que fueron llevados de forma expedita hacia la frontera con México.
“Hasta donde tengamos que ir lo haremos para ir en defensa de nuestros hermanos inmigrantes”, sentenció Torres.