«Escribo esta carta para contar mi experiencia en la Holy Angels Catholic Academy», escribió Danny, como le decían quienes lo querían, en la carta en la que relata el bullying que sufría por parte de sus compañeros de colegio.
Daniel Fitzpatrick, un niño de 13 años, tomó la determinación de suicidarse ante la falta de acción de las autoridades del colegio del barrio de Brooklyn, Nueva York, a las que les había avisado el hostigamiento que sufría.
Daniel tenía dos hermanas y fue una de ellas quienes lo encontraron sin vida en el ático de su casa en Staten Island, según una nota publicada por diferentes medios de comunicación.
La carta la escribió un mes antes de tomar la decisión. En ella aseguró: «Me rendí. Los profesores no hicieron nada. Mrs. Goldrick (la directora) no hizo nada. Ms. D’Alora es la mejor profesora. Ella me comprendió e hizo algo, pero no duró mucho».
De acuerdo a lo confirmado por el padre del niño, Daniel Fitzpatrick, la directora del colegio les dijo que ese no era «un buen ambiente» para Danny.
Desde el colegio emitieron un comunicado en el que indicaron que «la directora, los profesores y la plantilla de la Holy Angels Catholic Academy están destrozados por la pérdida de Daniel Fitzpatrick».
También dijeron que «a la luz de esta tragedia estamos reexaminando las políticas de prevención del bullying y el entrenamiento».