La vicepresidenta de Estados Unidos, Kamala Harris, llegará el domingo a Ciudad de Guatemala, donde estará casi un día para reunirse con el presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, y otras entidades para dialogar sobre migración y la lucha anticorrupción.
Se tiene previsto que Harris arribe a la Fuerza Aérea de Guatemala a las 17.10 hora local (23.10 GMT), donde se realizará una ceremonia protocolaria, para posteriormente retirarse a un hotel de la capital del país centroamericano, según la agenda preliminar.
El lunes se reunirá a las 9:30 hora local (15:30 GMT) con el presidente Giammattei y una hora más tarde se realizará la fotografía oficial de la visita de la vicepresidenta norteamericana y, finalmente, se retirará a México para continuar su primer gira extraterritorial.
La portavoz principal de Harris, Symone Sanders, aseguró a CNN esta semana que el objetivo primordial de la breve gira es «profundizar nuestra alianza estratégica y relación bilateral tanto con el gobierno guatemalteco como el mexicano, para avanzar una estrategia integral que encare las causas de la migración».
Además, el miércoles la propia Harris afirmó que quiere tener «una conversación franca» sobre la lucha contra la corrupción, el crimen y la violencia durante su estancia en Guatemala.
La vicepresidenta agregó que tiene intención de explicar lo que el Gobierno de EE.UU. ha hecho a nivel nacional e internacional, con conversaciones con líderes empresariales y gubernamentales sobre iniciativas de inversión y de desarrollo.
Asimismo, señaló que hay muchos otros temas sobre los que hablar en Guatemala, como por ejemplo qué pueden hacer las autoridades guatemaltecas para apoyar a la gente que necesita ayuda alimentaria, impulsar el desarrollo económico y para paliar los efectos del clima extremo.
El pasado 19 de mayo la vicepresidenta se reunió con mujeres líderes del sector judicial en Guatemala que viven de manera obligada fuera de su país tras haber combatido a grupos del crimen organizado y de cooptación del Estado.
Harris se entrevistó con las exfiscales Thelma Aldana y Claudia Paz, así como con la exmagistrada Gloria Porras y la exjueza Claudia Escobar, a quienes recibió en su oficina de ceremonias.
«La injusticia es una de las causas principales de la migración», subrayó la vicepresidenta estadounidense, quien consideró que esa situación está obligando a las personas a abandonar sus hogares «de forma involuntaria».
Por su parte, el viernes, el secretario de Estado de EE.UU., Anthony Blinken, expresó a su homólogo de Guatemala, Pedro Brolo, su «profunda preocupación» por los intentos de abolir entidades anticorrupción como la Fiscalía Especial Contra la Impunidad, tras una acción judicial presentada ante el máximo tribunal constitucional en contra del acuerdo que incorporó a la entidad a la estructura del Ministerio Púlbico.
Blinken dijo al canciller guatemalteco que están siguiendo «de cerca los recientes desafíos a los esfuerzos anticorrupción en Guatemala», aseguró el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, en un comunicado.
Harris recibió el encargo del presidente Joe Biden de frenar la inmigración irregular hacia Estados Unidos y desarrollar una estrategia con los países del norte de Centroamérica (El Salvador, Guatemala y Honduras) para atender las causas que obligan a miles de personas a dejar sus lugares de origen.
Según la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, en inglés), en abril pasado fueron detenidos 178.120 indocumentados que cruzaron la frontera con México, la cifra más alta para ese mes registrada desde el año 2000.