Israel realizó nuevos bombardeos aéreos y de artillería en la franja de Gaza el séptimo día de una ofensiva encaminada a neutralizar a Hamas y sus cohetes mientras se intensificaban los esfuerzos diplomáticos para resolver la crisis.
Los nuevos bombardeos afectaron sobre todo a instalaciones de las brigadas Ezzedin al Qasam, rama militar de Hamas, sin llegar a causar víctimas.
Por primera vez en este conflicto, un cohete lanzado desde Siria cayó la noche del domingo en el Golán, región ocupada por Israel, indicó el ejército israelí, que no registró víctimas.
El Ejército replicó con fuego de artillería contra posiciones de fuerzas regulares sirias y aseguró que «se identificaron blancos alcanzados».
El ejército israelí indicó además que «varios cohetes fueron lanzados desde Líbano contra el oeste de Galilea (…) No se señalaron heridos por el momento». El Ejército preciso que replicó con fuego de artillería y presentó una queja ante las fuerzas de la ONU.
177 muertos
Pese a las presiones internacionales, Israel reiteró el domingo su determinación de proseguir su ofensiva contra la Franja de Gaza hasta neutralizar la capacidad del movimiento islamista palestino Hamas de lanzar cohetes contra su territorio.
La aviación israelí lanzó por la mañana octavillas que instaban a los habitantes a evacuar el lugar «inmediatamente», en previsión de bombardeos masivos dentro de una campaña que ya dejó 172 muertos y al menos 1.130 heridos, en su mayoría civiles palestinos, según los servicios médicos palestinos.
Hamas, que controla la Franja, llamó a la población a no dejarse intimidar y a permanecer en sus hogares.
Por la tarde, unas 4.000 personas estaban instaladas en escuelas administradas por la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA). Por la noche ya eran 17.000.
Un responsable militar que requirió anonimato aseguró que la ofensiva en el norte de Gaza iba a empezar por la noche tras un día de calma que dejó siete muertos, en comparación con los 56 muertos de la víspera.
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abas, que hasta ahora se había mostrado relativamente discreto, anunció que pidió a la ONU que ponga «oficialmente el Estado de Palestina» bajo «protección internacional».
Éxodo de civiles
Después de una noche de pesadilla, muchos habitantes del norte de Gaza se echaron a la carretera el domingo, en coche, en burro, en carretas de caballos o a pie, cargando con las pertenencias que podían, comprobaron periodistas de la AFP.
Los palestinos con pasaportes de otros países fueron autorizados por las autoridades israelíes a salir de la Franja de Gaza, exiguo y paupérrimo territorio de 360 km2 y 1,2 millones de habitantes.
Desde la medianoche del sábado, Israel efectuó unas 20 incursiones aéreas, con lo cual ya son 1.330 los ataques llevados a cabo contra «blancos terroristas» desde el martes pasado.
Los bombardeos del domingo mataron a tres personas, entre ellas un adolescente de 14 años y una mujer de 44, según fuentes médicas palestinas.
El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu prometió proseguir la ofensiva «golpeando a Hamas cada vez con más intensidad» y acusó al movimiento islamista de usar a los civiles como «escudos humanos».
«No sabemos cuándo terminará la operación, puede llevar mucho tiempo», agregó, pese a la creciente presión internacional para poner fin a la ofensiva.
Desde el martes pasado, Hamas ha disparado contra el territorio israelí más de 800 cohetes, que dejaron una decena de heridos y no ocasionaron víctimas mortales. Este mismo domingo, la defensa antiaérea israelí destruyó dos cohetes disparados desde Gaza antes de que cayeran en Tel Aviv, según indicó el ejército.
Primera incursión terrestre
El ejército israelí ha movilizado a 40.000 reservistas y desplegado tanques y piezas de artillería junto a la frontera con la Franja de Gaza y hace días que amenaza con una operación terrestre de envergadura en la zona, bombardeada por aire y por mar.
Un comando de la marina israelí desembarcó el domingo en una playa de Gaza para atacar una lanzadera de cohetes. «La misión se ha llevado a cabo correctamente», anunció un portavoz militar, que precisó que cuatro soldados resultaron heridos leves en tiroteos.
La rama militar de Hamas, las brigadas Ezedin al Qasam, confirmó que «se produjeron tiroteos intensos» con «soldados de la marina sionista» que intentaban penetrar en el noroeste del enclave.
La espiral de violencia se desencadenó tras el secuestro y asesinato en junio de tres estudiantes israelíes en Cisjordania, que Israel atribuye a Hamas. Fueron seguidos por el asesinato de un joven palestino quemado vivo en Jerusalén por extremistas judíos.
Ya en noviembre de 2012 Israel había lanzado una ofensiva para tratar de poner fin a los disparos de cohetes desde Gaza. En una semana, la operación dejó 177 palestinos y seis israelíes muertos.
Frente diplomático
El jefe de la diplomacia estadounidense, John Kerry, llamó el domingo al primer ministro israelí Benjamin Netanyahu para reiterarle su disposición a ayudar a pactar una tregua en el conflicto de Gaza.
La Liga Árabe se reunirá este lunes, el mismo día en que llega a Oriente Medio el ministro alemán de Relaciones Exteriores, Frank-Walter Steinmeier.
El papa Francisco, durante la oración del Angelus, hizo un llamado por la paz en Gaza y pidió «gestos concretos para construir la paz».
En París, el presidente François Hollande volvió a pedir un alto el fuego «lo antes posible».
Los ministros alemán e italiana de Exteriores, Steinmeier y Federica Mogherini, llegarán estos días a Cercano Oriente.
En Asia, miles de personas salieron a las calles para condenar las operaciones israelíes y en apoyo a los palestinos. En Sídney eran 3.000 y había cientos en Hong Kong, Nueva Delhi y Yakarta.