Las autoridades de Colombia incautaron 1,071 kilos de cocaína a un grupo de disidentes de las FARC, que optó por no plegarse al proceso de paz con el gobierno, a quienes también le destruyeron un laboratorio donde procesaban droga, informó este domingo el Ejército.
«En la acción ofensiva se logra la localización (y) destrucción de un complejo dedicado a la producción de clorhidrato de cocaína», señaló un comunicado del Ejército entregado este domingo a la AFP, en el que se indicaba que el laboratorio hacía parte de las fuentes de financiamiento ilícito que usaba la disidencia del Frente Primero de las FARC.
«Es de resaltar que en este laboratorio fueron hallados 1,071 kilos de clorhidrato de cocaína, valorados en más de 40 millones de dólares», apuntó el texto.
La mayoría de los miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC, marxistas) se acogieron al pacto de paz firmado en noviembre pasado entre esa guerrilla y el gobierno de Juan Manuel Santos.
Sin embargo, algunas estructuras guerrilleras optaron por apartarse del acuerdo y seguir delinquiendo por su cuenta, como ocurrió con integrantes del Frente Primero, que actúan sobre todo en el sur del departamento de Guaviare (sureste).
El operativo contra los disidentes se desarrolló el viernes en la vereda Kiniquiare, en zona rural del municipio del Retorno, en coordinación con las Fuerzas Militares y la Policía.
En ese lugar también se encontraron 966 kilos de pasta base de coca, señaló el comunicado.
«Con ese importante resultado se logra dar un fuerte golpe al corazón financiero y logístico a las disidencias del frente primero, que delinquen sobre esta zona del país», expresó el Ejército en el comunicado.
Colombia es el principal cultivador mundial de hoja de coca, materia prima de la cocaína, con 96,000 hectáreas de sembradíos, y también el mayor productor de esa droga con 646 toneladas en 2015, según la ONU.