Tras un balance de 400 muertos en Haití, Matthew dejó, este viernes tres fallecidos en La Florida, informaron las autoridades policiales.
La tormenta impidió la respuesta de los rescatistas a los llamados de una mujer de 58 años y un hombre de 82 que necesitaban asistencia médica. Una tercera víctima, una mujer del condado de Volusia, murió cuando un árbol cayó sobre su trailer.
Aunque se debilitó levemente, Matthew sigue siendo un huracán «extremadamente peligroso» que ha dejado a un millón de personas sin electricidad en Florida. El ciclón permanece sobre la ciudad de Jacksonville con vientos máximos sostenidos de 175 Km/hora.
Las autopistas y calles desiertas, las tiendas cerradas, árboles caídos y las ciudades costeras permanecen bajo toque de queda y con sus puentes cerrados.
En un comunicado de las 17H30, hora local, la ciudad de Jacksonville alertó de la posibilidad de tornados e informó que estaban teniendo lugar «importantes inundaciones con significativos daños en toda la ciudad».
Los equipos de rescate no atenderán llamadas de emergencia en las zonas de evacuación obligatoria, en las costas y riberas, hasta que su acceso no sea seguro.
Viene la crecida
Las autoridades advirtieron que, si bien los vientos de Matthew han decrecido en fuerza, se esperan crecidas de hasta 3 metros.
«Aunque la tormenta se haya degradado, todavía vendrá la crecida», dijo el alcalde de Jacksonville, Lenny Curry, en una conferencia de prensa.
Refiriéndose a las órdenes de evacuación, que afecta a casi 500.000 personas un tercio de las cuales se cree que no obedecieron, el alcalde añadió: «Ahora les pido que se queden donde sea que estén».
También el gobernador Rick Scott dijo que estaba «especialmente preocupado» por las crecidas que se esperan en el río St. Johns.