Guatemala reportó este lunes 336 nuevos casos de COVID-19 y por tercer día consecutivo rebasó la barrera de los 300 contagios diarios después de que el sábado sumara 311 y el domingo 370, la cifra más grande en un día a la fecha.
El ministro de Salud guatemalteco, Hugo Monroy, informó la cifra y dijo además en un mensaje por televisión que en las últimas 24 horas se reportó la muerte de un hombre de 66 años a causa del coronavirus, por lo que en total suman 59 los fallecidos debido a la enfermedad.
Monroy señaló que este lunes recibieron el alta médica 16 pacientes y que en total hay 3.760 casos confirmados de coronavirus en el país centroamericano.
De acuerdo al funcionario de la cartera sanitaria, los 336 nuevos casos fueron detectados tras realizar 1.899 pruebas en las últimas 24 horas.
Guatemala ha realizado a la fecha un promedio de alrededor de 1.500 tests diarios para detectar el coronavirus por cada millón de habitantes, aún lejos del promedio del continente que ronda las 4.000 pruebas por cada millón de habitantes, según diversas fuentes.
El presidente guatemalteco, Alejandro Giammattei, había decretado una cuarentena general el 15 de marzo y el toque de queda desde el 22 de marzo, cuando se contabilizaban 18 casos y un fallecido, pero el 3 de mayo decidió la reapertura gradual de actividades.
La reapertura, sin embargo, se vio interrumpida el 14 de mayo cuando el conservador Giammattei, médico de profesión, ordenó a la población confinarse durante 21 horas diarias los viernes, sábados y domingos debido al ascenso de casos.
Actualmente, Guatemala se encuentra bajo toque de queda de cinco de la tarde a cinco de la mañana de lunes a viernes, y en confinamiento total los fines de semana.
El alcalde de Quetzaltenango, la segunda ciudad más grande del país, Juan Fernando López, pidió el 12 de mayo un confinamiento «total» durante varios días debido al coronavirus ante el aumento de contagios, por considerar que, de lo contrario, «vamos a morir muchos» .
Al menos 200 funcionarios guatemaltecos han contraído la enfermedad entre policías, agentes municipales de tránsito, miembros del sistema de salud y trabajadores de algunos ministerios, de acuerdo con varias fuentes estatales.
El pasado 23 de marzo se registró la primera muerte por coronavirus de un miembro del personal sanitario, un auxiliar de enfermería que laboraba en un hospital en el oeste del país., según confirmó el ministro Monroy.