Guatemala cumplió este martes seis meses exactos desde que el Gobierno anunciara el primer caso positivo de la COVID-19, con una cantidad estimada de 1 de cada 9 personas contagiadas y la perspectiva de un posible segundo rebrote de contagios en el cierre de 2020.
El director de la Comisión Presidencial de la Atención a la Emergencia COVID-19 en Guatemala (Coprecovid), Edwin Asturias, aseguró en una conferencia de prensa que un estudio de serología de usuarios de gimnasios en la Ciudad de Guatemala arrojó el estimado de que 1 de cada 9 personas en Guatemala se contagió de coronavirus en la primera ola de la pandemia.
Además, indicó que aún no hay indicios de una segunda ola de casos pues se continúa «viendo una caída en el número de casos, a pesar de que hemos hecho cada vez más pruebas».
Asturias dijo que, por lo menos en el departamento de Guatemala (central) cayó a un 10 % de contagios por pruebas realizadas en la última quincena de estudios, lo cual indica que «todavía la epidemia no está mostrándonos una segunda ola» y eso es «alentador».
Pocas pruebas
El Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, el ente rector de la pandemia, contabiliza en estos seis meses desde que surgió el primer caso -el 13 de marzo pasado- que hay acumulados 98,389 casos positivos, además de 3,410 fallecimientos.
También, los registros públicos del Ministerio de Salud muestran que se han practicado 368,058 pruebas desde el 13 de febrero pasado (un mes antes del primer contagio) y que se cuenta con un 27 % de proporcionalidad de casos.
El promedio de pruebas diarias efectuadas de Guatemala es uno de los más bajos en la región, con 1,736 hisopados reportados por el sistema público, el seguro social y algunos laboratorios privados que aportan información por cuenta propia.
De acuerdo a las mismas autoridades guatemaltecas, para evitar eficientemente la expansión del virus es necesario procesar al menos 5,000 pruebas diarias.
Casos sin reportar
Asturias estimó que «probablemente, el número de casos es de 5 a 10 veces más de lo que estamos reportando en el sistema de control de casos, como sucede en muchos países, pero es la primera muestra que nos da un estudio como de serología».
Subrayó que, en algunas zonas del occidente de Ciudad de Guatemala, los contagios aumentan de 1 por cada 5 personas, es decir el 20 % de la población, «como se ha visto en varios países del mundo».
Con 1 de cada 9 personas esté contagiada en el país centroamericano, es decir el 12 % de los más de 16 millones de habitantes, Asturias no consideró tratarse de «un subregistro, porque tendríamos que considerar a las personas asintomáticas y personas con síntomas muy leves que no acuden a los servicios médicos».
Expresó que aún falta «mucho trecho para la protección comunitaria o colectiva, pues para eso deberíamos estar contagiados 7 de cada 10 guatemaltecos y por ahora somos 1 de cada 9».
Pero una segunda ola, que prevé tanto la Coprecovid como Salud y la Presidencia, «como tal, se dará en el momento en que veamos una escalada en el número de casos, en el porcentaje de pruebas positivas y un aumento de la ocupación hospitalaria. Todavía ninguno de estos tres indicadores son lo suficientemente fuertes para decir que estamos en una segunda ola de contagios», sostuvo Asturias.
La Coprecovid concluyó que, con el fin de evitar un «evento de súper contagio», mantendrá los cementerios del país cerrados al público los días 31 de octubre y 1 y 2 de noviembre, en relación a la conmemoración del día de todos los santos y el día de muertos, cuya tradición está arraigada a la cultura nacional.
Desde el pasado 27 de julio Guatemala implementó la «reapertura» de negocios y el pasado 1 de octubre el confinamiento terminó definitivamente con el fin del toque de queda (iniciado el 22 de marzo) y la apertura de bares, cines, gimnasios y deporte amateur.