La nueva Guardia Nacional de México participó en una operación en la que fueron ubicados y detenidos 61 migrantes centroamericanos, incluyendo 27 menores de edad, que estaban en un hotel de la ciudad turística de Cancún, informó este martes la Fiscalía del suroriental estado de Quintana Roo.
La Fiscalía informó que los migrantes, provenientes de Guatemala, Honduras y El Salvador, quedaron a disposición del Instituto Nacional de Migración (Inami), que determinará su situación migratoria.
De acuerdo con la institución, se trata de 16 mujeres, 18 hombres y 27 menores de edad, que después de ser valorados médicamente fueron puestos a disposición de la autoridad migratoria para los trámites correspondientes.
Por su parte, fuentes del municipio de Benito Juárez, donde está Cancún, revelaron que alrededor de las 07.00 hora local (12.00 GMT) de este martes agentes de los tres niveles de gobierno (federal, estatal y municipal) y de la Guardia Nacional iniciaron un operativo en el hotel María Dolores, en la zona centro de la ciudad.
Un reporte de paramédicos de la Cruz Roja Mexicana refiere que tras valorar a las personas se ubicó a una menor de dos años que presenta un cuadro gripal con fiebre, y un informe policial indica que fueron decomisadas siete bolsas pequeñas de marihuana.
El despliegue de miles de agentes de la Guardia Nacional -que comenzó formalmente sus operaciones el 30 de junio- en tareas de control migratorio es parte de un acuerdo alcanzado el 7 de junio con el Gobierno de Estados Unidos para evitar la imposición de aranceles a los productos mexicanos.
El presidente estadounidense, Donald Trump, había anunciado a fines de mayo su decisión de imponer los aranceles como medida de presión al país latinoamericano para frenar el flujo de migrantes, que ha registrado un repunte desde octubre del año pasado.
Además, México aceptó también acoger en su territorio a aquellos migrantes que esperan resolver su solicitud de asilo en Estados Unidos.
Este lunes, el Inami informó que México ha recibido desde el 29 de enero a 18.503 migrantes centroamericanos que esperan la resolución de su trámite de asilo en Estados Unidos.