Un escolar chino de diez años se suicidó tirándose desde el 30º piso, después de que su maestro lo conminó a redactar su autocrítica o saltar al vacío, indicó el jueves un medio oficial.
El maestro ordenó al niño que escribiera una carta de excusas de 1.000 caracteres (chinos) debido a que hablaba en clase, señaló la Radio Nacional China (CNR), citando a un vecino de la familia.
Como el chico trató infructuosamente varias veces de terminar su autocrítica, aparentemente el docente le dijo que no le quedaba más alternativa que saltar del último piso de su edificio, según el reportaje de CNR, que cita a parientes cercanos y a un vecino.
Según la emisora, se encontraron algunas palabras del niño, garabateadas en uno de sus manuales escolares: «Maestro, no lo logro. Ya dudé varias veces cuando traté de saltar del último piso del edificio».
Después de la trágica muerte del niño, miembros de su familia agitaron frente a su escuela, en la ciudad de Chengdu (sudoeste), un cartel que decía: «El maestro obligó a nuestro hijo a saltar del último piso del edificio», según fotos difundidas el jueves en internet.
«La investigación policial sigue su curso», declaró a la AFP un responsable del distrito de Jinjiang, sin dar detalles.
El sistema de educación chino obedece a una disciplina muy estricta. La tradición china inculca un respeto absoluto de la autoridad y exige que los niños obedezcan escrupulosamente las instrucciones de sus docentes.