Como venganza por haber robado su casa, un empresario llamado Jorge Aduna Villavicencio mandó a matar a seis jóvenes a través de sus escoltas, quienes los desaparecieron, los descuartizaron y los quemaron.
Este hecho fue confirmado por la Fiscalía General de Justicia Estatal de México, luego de que las investigaciones señalaran al empresario. De acuerdo con las indagaciones, los jóvenes ingresaron con violencia al domicilio de familiares del empresario, en Lomas del Sur, en la ciudad de Puebla.
Entre los responsables por la muerte de los jóvenes se encuentran los escoltas del empresario, Alejandro Páez Valenzuela y José Emanuel Limón Meneses; un ex policía identificado como Ricardo López Meza y un ex agente de la Agencia Federal de Investigación (AFI), Yosafath Berlanga Flores, según informó el periódico SinEmbargo.Mx.
Las investigaciones realizadas por la Fiscalía determinaron que los sujetos lograron ubicar a los seis jóvenes que participaron en el robo a través de un iPad que había sido robada el día de los hechos, informó Sin Embargo.
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“Una vez identificado uno de los probables responsables, se dieron a la tarea de ubicarlos y privarlos de la libertad, para posteriormente trasladarlos a un inmueble en la colonia San José El Conde, al parecer de la propiedad de Jorge Aduna, en donde fueron asesinados y después sus cuerpos fueron descuartizados, incinerados y tirados a una coladera”, reportó el periódico digital.
Primero los “levantaron”
De acuerdo con las investigaciones fiscales, los sujetos se encargaron primero de planear y “levantar” (secuestrar) a los jóvenes que participaron en el asalto.
La primera víctima fue Marco Antonio Cautle Cautle, de ocupación lechero, quien al momento de ser secuestrado se conducía en su vehículo, el 19 de octubre de 2015.
El 28 de octubre de 2015, el segundo joven, Román Limón Gómez, viajaba en compañía de su esposa e hija en un vehículo, cuando fue interceptado y “levantado” por sujetos que se conducían en dos camionetas, una con vidrios polarizados y otra de color rojo.
Más tarde, el 12 de noviembre de 2015, Pedro Negrete Orea y Luis Ángel Flores Gutiérrez, de manera simultánea, fueron privados de la libertad engañados mediante ofertas de trabajo.
El 26 de noviembre de 2015 desapareció Rogelio Rivera Osorio, quien según testigos fue visto por última vez en compañía de un sujeto que usaba sombrero, quien también le ofreció trabajo y hoy está plenamente identificado como uno de los escoltas detenidos, según informó el periódico mexicano Sin Embargo.
Asimismo, el 27 de noviembre de 2015, Bryan Gerardo Torres Sandoval, fue atraído con engaños de comprarle cocaína. Una persona se acercó y lo privó de su libertad. Se trata del mismo sujeto que habría secuestrado a Rogelio Rivera y que también tuvo contacto con Pedro Negrete y Luis Ángel Flores.