El Senado ruso aprobó este miércoles la polémica ley sobre el reclutamiento militar electrónico que prohíbe a los llamados a filas abandonar el país y prevé otros castigos para los que evaden el servicio militar.
La ley fue apoyada por 163 senadores y solo una legisladora, Liudmila Nárusova, votó en contra.
Nárusova, viuda de Anatoli Sobchak, el exalcalde de San Petersburgo conocido como mentor del presidente ruso, Vladímir Putin, es la única voz disidente en la Cámara alta del Parlamento ruso desde el inicio de la campaña militar en Ucrania.
El pasado 15 de marzo, Nárusova también fue la única senadora en votar en contra de una ley que endurecía los castigos por «desacreditar» al Ejército ruso.
Mientras, en septiembre de 2022, protestó contra la introducción en el Código penal de los conceptos de «movilización» y «ley marcial».
La Duma o cámara de diputados de Rusia aprobó ayer la ley de reclutamiento militar electrónico que impide a los llamados a filas salir del país desde que reciban la correspondiente notificación y hasta que se presenten en la oficina de reclutamiento.
Los rusos tienen un plazo de dos semanas para presentarse una vez hayan sido notificados de su obligación de cumplir el servicio militar.
Además, en caso de que el afectado no acuda al centro de alistamiento en un plazo de 20 días, se le restringirá provisionalmente el permiso de conducir, comprar inmuebles o solicitar un crédito.
Aunque 394 diputados aprobaron la moción y sólo uno se abstuvo, los comunistas denunciaron haber recibido un documento de varios cientos de páginas con las enmiendas poco antes de la votación.
Según sus autores, la ley intenta corregir los numerosos errores cometidos durante la movilización parcial ordenada por el presidente ruso, Vladímir Putin, que provocó el éxodo masivo de cientos de miles de rusos.
Este miércoles el portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, eludió decir cuándo sería rubricada la ley por el presidente y señaló que Putin la estudiará una vez que concluyan todos los trámites en el Parlamento.