Una encuesta realizada por Mastercard a consumidores de 19 países revela que el 63 % está usando dinero en efectivo con menos frecuencia o no lo usan en absoluto durante la pandemia de la COVID-19 por razones de higiene y seguridad y que en América Latina el porcentaje es aún mayor.
Si se toman en cuenta solo los resultados de Brasil, Colombia, Costa Rica y República Dominicana, el promedio es tres puntos mayor (66 %), según un comunicado difundido este jueves por Mastercard para informar del estudio realizado por internet entre el 10 y el 12 de abril a una muestra general de 17.000 personas.
El 77 % de los brasileños, el 68 % de los costarricenses, el 61 % de los colombianos y el 58 % de los dominicanos indicaron que están usando menos dinero en efectivo o que no lo usan en absoluto.
A partir de marzo Mastercard lideró un movimiento para incrementar los límites de los pagos sin contacto en toda América Latina y el Caribe, una región menos avanzada que otras en lo que respecta a la penetración de esa tecnología.
Según el comunicado, en los países de América Latina y el Caribe se ha visto un crecimiento exponencial en transacciones sin contacto de hasta un 500 % en general desde marzo del año pasado.
Actualmente en la región un 75 % de terminales en el punto de venta están listas para aceptar transacciones sin contacto y un 60 % de instituciones financieras emiten tarjetas habilitadas para el pago sin contacto.
El sondeo muestra que un 56 % de los encuestados latinoamericanos reconoce ser más consciente ahora de la suciedad del dinero en efectivo y un 84 % opina que el pago sin contacto es más higiénico.
De hecho, el 35 % de los consumidores de la región latinoamericana y caribeña ha aumentado el uso de medios de pago sin contacto en coincidencia con la pandemia de la COVID-19.
Los resultados del estudio muestran el «profundo» impacto de la distancia social y otras normas de seguridad por COVID-19 en el comportamiento del consumidor a la hora de pagar, según Mastercard.
A un 79 % de los consumidores de esos países les parece una manera más segura de pagar en comparación con el dinero en efectivo y un 78 % indicó que continuarán usando los pagos sin contacto incluso después de que termine la pandemia.
Entre los menores de 35 años, un 82 % aseguró un uso continuo después de que pase el COVID-19.
«A medida que vivimos la primera pandemia global en una era definida por la digitalización de nuestras vidas, los pagos con las tarjetas sin contacto han adquirido una nueva urgencia», dijo Walter Pimenta, vicepresidente sénior de Productos e Innovación, Mastercard de América Latina y el Caribe.
Los datos de Mastercard revelan un crecimiento de más del 40 % en las transacciones sin contacto a nivel mundial en el primer trimestre del 2020.
Además, el 80 % de las transacciones sin contacto es por un valor menor a 25 dólares estadounidenses, un rango que generalmente está dominado por efectivo.