El dueño de un bar del barrio neoyorquino de Manhattan deberá pagar 500,000 dólares a 16 empleadas y extrabajadoras por acoso sexual, discriminación e impago, según la Fiscalía de Nueva York.
De acuerdo con una investigación de la Fiscalía, Hakan Karamahmutoglu propietario del establecimiento «Sweet and Vicious» (Dulce y Vicioso) creó y mantuvo un ambiente de trabajo hostil y discriminatorio para sus trabajadoras, quienes sufrieron insultos xenófobos y discriminación sexual y racial.
«Las empleadas fueron sometidas de manera habitual a comentarios inapropiados sobre su raza, sexualidad, cuerpos y apariencias, y sufrieron insinuaciones sexuales no deseadas por parte de gerentes del local y clientes», asegura una nota en la página de la fiscal general, Letitia James.
Citada en la nota, James aseguró que «durante demasiado tiempo, los trabajadores de la industria hotelera se han visto obligados a soportar una cultura generalizada de acoso sexual y discriminación que no ha sido denunciada».
Según la Fiscalía, los 16 meses de pesquisas desvelaron que Karamahmutoglu insultaba de manera habitual a sus trabajadoras llamándoles «vacas» y «zorras» y les hacía comentarios vejatorios sobre sus cuerpos, apariencia o manera de vestir.
Además, permitía que los gerentes varones y clientes las acosaran y que estos últimos llegaran incluso a amenazarlas físicamente.
El pago de medio millón de dólares es resultado del acuerdo extrajudicial aceptado por el dueño del bar que le evitará tener que someterse a juicio.