Aislado y criticado incluso en su círculo más íntimo, el candidato republicano a la Casa Blanca Donald Trump padecía el sábado la crisis más grave desde el comienzo de su campaña tras la difusión de declaraciones de 2005 en las que menosprecia a las mujeres.
Un día antes del segundo debate con su rival demócrata Hillary Clinton, en St. Louis, Trump rechazó tajantemente los pedidos para que renuncie a su candidatura.
«Nunca, jamás, me doy por vencido», dijo al diario The Wall Street Journal.
«El respaldo que estoy logrando es increíble, porque Hillary Clinton es una candidata terriblemente imperfecta», añadió.
Trump se disculpó en las primeras horas del sábado, luego de que el diario The Washington Post divulgara un video donde el magnate menosprecia a las mujeres con un lenguaje vulgar, generando rechazo en filas republicanas y dando a Clinton munición fresca para el debate.
«Cualquiera que me conozca sabe que estas palabras no reflejan lo que soy. Lo dije, estuve mal y me disculpo», afirmó en un video en su cuenta Twitter. «Fueron chistes de vestuario, una conversación privada de hace años… me disculpo ante todos aquellos que puedan haberse sentido heridos», se justificó.
Su esposa Melania salió en su rescate pidiendo a los estadounidenses que lo perdonen.
«Las palabras que mi marido usó son inaceptables y ofensivas para mí. Esto no representa al hombre que yo conozco», señaló en un comunicado, en el que agregó que espera «que la gente acepte su disculpa, como yo lo he hecho».
«Que dé un paso al costado»
Pero la avalancha de reacciones en filas republicanas no se detuvo. Su propio compañero de fórmula Mike Pence dijo que «no consiento esas declaraciones y no puedo defenderlas», y añadió que se sentía «ofendido».
El senador John McCain, una de las figuras más influyentes del partido, anunció este sábado que retira su apoyo al magnate.
«El comportamiento de Donald Trump esta semana, que concluyó con la revelación de sus comentarios degradantes sobre las mujeres y su jactancia de agresiones sexuales, imposibilitan que continúe respaldando, incluso de manera condicional, su candidatura», afirmó McCain en un comunicado.
El senador por Utah, Mike Lee, dijo que «respetuosamente le pido que dé un paso al costado», y el senador por Illinois, Mark Kirk, escribió en Twitter que Trump debería «abandonar» la liza y el Partido Republicano «emplear reglas para un reemplazo de emergencia».
También el actor y exgobernador de California Arnold Schwarzenegger se sumó a los pedidos de renuncia. «Por primera vez desde que me convertí en ciudadano estadounidense, en 1983, no votaré por un candidato republicano a la presidencia», dijo.
«Estoy enfermo por lo que escuché hoy», expresó por su lado el viernes el jefe de la bancada republicana en el Congreso, Paul Ryan.
«Las mujeres deben ser defendidas y reverenciadas, no ser tratadas como objetos. Espero que Trump trate esta situación con la seriedad que se merece y trabaje para demostrarle al país que él tiene un mayor respeto por las mujeres que lo que este video sugiere», añadió.
El video
En 2005, Trump era un hombre de negocios y estrella de la televisión que acababa de casarse con su tercera esposa, Melania Knauss.
En el video de marras, Trump le dice a un presentador de televisión durante una conversación grabada -sin su conocimiento- en un automóvil: «cuando eres una estrella, ellas te dejan hacerlo. Uno puede hacer lo que quiera».
En el video, el magnate cuenta al presentador de televisión su primer intento fallido de seducir a una mujer, cuyo nombre no se conoce.
«Lo intenté y no pude, lo reconozco», dijo Trump. «Me fui hacia ella como a una perra, pero no pude llegar a eso. Y estaba casada», afirmó.
La conversación continúa hasta que los dos hombres ven a una actriz que les espera afuera del vehículo, Arianne Zucker.
«Debía comer unos Tic-Tac (mentas) en caso de que comenzara a besarla», dijo Trump. «Me siento atraído automáticamente por las bellas (…) las beso enseguida, como un imán. Yo las abrazo, sin siquiera esperar», expresaba en la grabación.
Ataques
En medio de la polémica, el magnate lanzó un ataque indirecto contra Clinton, al acusar a su esposo, el expresidente Bill Clinton, de maltratar a las mujeres.
«He dicho cosas tontas pero existe una gran diferencia entre las palabras y los actos de otras personas. Bill Clinton realmente maltrató a las mujeres, y Hillary acosó, atacó, humilló e intimidó a sus víctimas», afirmó.
«Hablaremos de ello en los próximos días», advirtió Trump.
La campaña demócrata contrató a un especialista para difundir una compilación de declaraciones antiguas y recientes de Trump sobre las mujeres.
A cuatro semanas de las presidenciales, Trump necesita aumentar su popularidad entre los electores moderados, las minorías y las mujeres.
Pero el panorama luce lúgubre. En los últimos días, el magnate ha sido blanco de duras críticas por haber maltratado a la ex Miss Universo venezolana Alicia Machado, al llamarla «gorda» y «cerdita» años atrás, un asunto que Clinton ventiló en el primer debate presidencial.