Al menos cuatro personas resultaron muertas este sábado durante un tiroteo ocurrido en una localidad al sur de la Ciudad de Guatemala, en el que también fue herido un niño de nueve años.
El «fuerte ataque armado» se registró en el municipio de Villa Nueva, a 20 kilómetros al sur de la capital guatemalteca, indicó a periodistas el oficial de los Bomberos Municipales Gerardo Martínez.
Los cuerpos de socorro precisaron que dos de los fallecidos, Jonathan Geovanni Quiñónez, de 21 años, y Ana Lucía López Ramírez, de 20, fueron encontrados en la vía pública con heridas mortales de bala.
Las fuerzas de seguridad no han divulgado los motivos del tiroteo, supuestamente originado por un conflicto entre pandilleros según medios locales.
Los bomberos trasladaron a un hospital a una mujer y un hombre heridos en el incidente armado, pero ambos murieron una vez ingresados, aseveró Martínez.
La mujer fue identificada como Miriam Apicholá Villagrán, sin que se haya divulgado el nombre de la otra víctima mortal.
Además, un niño de nueve años resultó herido por un balazo en el hombro, por lo que fue llevado por los bomberos al servicio de pediatría del hospital Roosevelt, uno de los dos más grandes de Guatemala.
Martínez indicó que al parecer el menor iba caminando por la calle cuando se produjo el tiroteo.
Guatemala es considerada por organismos internacionales como una de las 20 naciones más violentas del mundo, en un listado que incluye a varios de sus vecinos como México, Honduras, Belice y El Salvador.
Las autoridades guatemaltecas han contabilizado al menos 60.000 homicidios en la última década, la mayoría perpetrada con arma de fuego y vinculada a las pandillas, el narcotráfico y la violencia doméstica.
El país centroamericano registró durante 2019 un total de 3.578 asesinatos, es decir una tasa de 21 homicidios por cada 100.000 habitantes, según su Ministerio de Gobernación (Interior).
La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera que existe una «epidemia» de violencia en un territorio cuando se registran tasas de más de 10 homicidios por cada 100.000 habitantes.