Dos semanas después de que el volcán de Fuego de Guatemala registrara la mayor erupción de los últimos años, dejando al menos 110 muertos, las autoridades han decidido este domingo dar por concluidas las labores de búsqueda y declarar la zona inhabitable.
En una reunión, la Coordinadora Departamental para la Reducción de Desastres de Escuintla determinó que «las acciones de búsqueda se suspenden definitivamente en las comunidades San Miguel Los Lotes y El Rodeo» y que el área «es inhabitable y de alto riesgo».
Estas fueron dos de las zonas más damnificadas por la ceniza, la arena y la lava que soltó el cono aquel domingo y solo en San Miguel Los Lotes, según las autoridades, había unas 186 viviendas que quedaron totalmente enterradas.
El pasado 3 de junio, el volcán de Fuego registró la mayor erupción de los últimos años, dejando 110 muertos, casi 200 desaparecidos y más de 1.7 millones de guatemaltecos afectados, la mayoría en los departamentos de Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez.
Dos de los desaparecidos son los Bomberos Voluntarios Juan Bajxac y Antonio Castillo, a quienes en Alotenango les tienen puesto un altar a la espera de que sus restos regresen a sus familias para poder enterrarlos. El cuerpo de socorro ha anunciado que sí continuará con su búsqueda.
Es por ello que en este municipio, ubicado en Sacatepéquez, «las instituciones de primera respuesta se mantendrán en el lugar hasta la limpieza del área y encontrar a los compañeros bomberos», indicó el portavoz de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, David De León.
Muchos de los damnificados continúan en los 17 albergues habilitados y según las últimas cifras se están atendiendo a un total de 3.571 personas, repartidas en 12 albergues que funcionan en Escuintla (2.798), cuatro en Sacatepéquez (754) y uno en Suchitepéquez (19).
Las autoridades aún no han decidido si declararán el área un camposanto.
El volcán de Fuego continúa este domingo con actividad y genera de 4 a 5 explosiones débiles por hora que expulsan una columna de ceniza gris de hasta los 4.700 metros de altura sobre el nivel del mar.
Las autoridades también reportan «retumbos débiles» con ondas de choque moderadas que originan «avalanchas moderadas» en el contorno del cráter, aunque no descartan que con la aparición de las lluvias desciendan lahares por las barrancas.