Un científico nuclear iraní, Shahram Amiri, fue ejecutado en la horca tras ser condenado por facilitar informaciones secretas a Estados Unidos, informó el domingo un portavoz del poder judicial.
Amiri había desaparecido en junio de 2009 durante una peregrinación a Arabia Saudita y volvió a aparecer en julio de 2010 en Estados Unidos, solicitando regresar a Irán. Fue acogido entonces por funcionarios iraníes y desde entonces se carecía de noticias de él.
«Shahram Amiri, que facilitaba al enemigo [Estados Unidos] informaciones clasificadas, fue ahorcado», declaró en su rueda de prensa semanal Gholamhosein Mohseni-Ejeie, citado por la agencia Mizan Online, dependiente del poder judicial.
«Este individuo no imaginaba que nuestro sistema de inteligencia sabía lo que hacía y cómo fue llevado a Arabia Saudita», afirmó el portavoz, quien añadió que «desde su marcha, un tribunal de primera instancia lo había condenado a muerte».