El canciller de México, José Antonio Meade, se mostró este miércoles crítico ante las iniciativas «unilaterales» en la lucha contra el narcotráfico, como el proyecto de Uruguay de regular el cultivo y venta de marihuana, y abogó por una política global en el continente.
Los «cambios de estrategia unilaterales no ofrecerán una solución a un problema que rebasa fronteras», dijo Meade en un encuentro con la prensa en París, donde se encuentra de visita.
El secretario de Relaciones Exteriores recordó que desde la Cumbre de las Américas del año pasado en Cartagena de Indias se ha reconocido en la Organización de Estados Americanos (OEA) que la lucha contra el narcotráfico «exige un replanteamiento, exige un debate, un nuevo consenso».
En esa línea, dijo, México considera que «el enfoque no puede ser unilateral», y abogó por un nuevo «paradigma» consensuado en el continente, con el que afrontar «un problema global».
El gobierno uruguayo prepara actualmente la reglamentación para el cultivo y la venta de marihuana a un dólar el gramo a partir de inicios de 2014, una vez que el Senado apruebe su legalización, probablemente a finales de noviembre.
De materializarse, el proyecto, que el secretario general de la OEA José Miguel Insulza ve «con simpatía», convertiría al Estado uruguayo en el primero del mundo en asumir el control de todo el proceso de producción y venta de cannabis.
En México, donde han muerto alrededor de 77.000 personas desde 2006 -según cifras del actual gobierno mexicano- fruto de la violencia del narcotráfico, se ha avivado en los últimos meses el debate en torno a la legalización de la marihuana, una causa que abraza con fuerza el expresidente Vicente Fox (2000-2006) y otros exaltos funcionarios.