El presidente estadounidense, Donald Trump, dijo este miércoles que es «muy extraño» que durante la parte final del recuento esta madrugada haya perdido ventaja en estados clave, mientras que su jefe de campaña aseguró esta mañana que «cuando todos los votos legales sean contabilizados el presidente ganará» unas elecciones que están aún en el aire.
Trump reiteró sus dudas sobre la legalidad del recuento en un tuit: «La pasada noche estaba liderando, a menudo con fuerza en muchos estados clave, en casi todas las instancias (en estados) controlados y regidos por demócratas. De repente, uno por uno comenzaron a desaparecer mágicamente mientras papeletas sorpresa eran contadas. MUY EXTRAÑO y los ‘pollsters’ (expertos políticos) lo tenían completa e históricamente mal».
En una comparecencia esta madrugada desde la Casa Blanca, Trump fue más taxativo al acusar sin pruebas de fraude electoral y amenazar con ir al Tribunal Supremo y se declaró ganador mientras los votos aún eran contados y se experimentaban retrasos por la ingente llegada de votos por correo debido a la pandemia.
El jefe de campaña de Trump, Bill Stepien, aseguró esta mañana en un llamada con los periodistas que «una vez todos los votos legales sean contabilizados el presidente ganará» y que lucharán en los tribunales para que los votos que consideren «ilegales» no se cuenten.
«Confiamos en nuestras matemáticas», reiteró en varias ocasiones el responsable de la campaña de Trump, quien aseguró que se ven ganadores en Arizona, un estado que las proyecciones de varios medios dan al demócrata Joe Biden por un amplio margen.
«Tenemos números favorables en Arizona», aseguró Stepien, que auguró que se impondrán con unos 30.000 votos de ventaja frente a Biden cuando todo el escrutinio se complete.
«Creemos que vamos a seguir mejorando en entre un 2 y un 5 por ciento los datos históricos del voto latino y afroamericano», indicó.
En Pensilvania, otro de los estados donde el recuento se ha retrasado por el alto volumen de voto por correo a procesar, la campaña de Trump espera que con la inclusión de papeletas de «condados Trump», donde el republicano se ha mostrado fuerte, como Luzerne, conseguirán superar al influjo de votos desde las grandes ciudades, que favorecen a Biden.
En dicho estado, clave para la victoria de Biden, que ya consiguió anoche darle la vuelta a Arizona, la campaña de Trump estima que se impondrá con 40.000 votos de ventaja, algo en lo que la mayoría de expertos no concuerdan.
Los responsables de la estrategia electoral de Trump confían en que un proceso similar se verá en Michigan, mientras que en Wisconsin, donde los márgenes de Biden son mínimos, podrían optar por un recuento completo.
Asimismo, consideraron que con el avance del escrutinio en Nevada, Trump debería imponerse con unos 5.500 votos de ventaja.