Un centenar de indocumentados fueron presuntamente estafados por tres hombres que se hacían pasar por agentes federales de Estados Unidos, que recaudaron 6 millones de dólares con la promesa de legalizar su situación migratoria.
Los acusados fueron arrestados el miércoles, según un comunicado del Departamento de Justicia (DoJ, en inglés). Dos de ellos vivían en California (oeste), otro en Tijuana, México.
Hardev Panesar, de 69 años y Rafael Hastie, de 47 años, decían a los inmigrantes desesperados que eran oficiales del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y que por exorbitantes tarifas de miles de dólares, podían conseguir papeles y detener procesos de deportación.
Un tercer sujeto, Gurdev Singh (56), fue acusado de colaborar con esta red fraudulenta.
«Panesar y Hastie nunca trabajaron en el DHS» y «desde 2014 falsamente sostuvieron que eran agentes» federales, indicó la nota.
«Convencían a las víctimas de que eran agentes, en parte porque mostraban credenciales falsas de la agencia cuando se reunían. Panesar y Hastie también proveían de aplicaciones de migración y tomaban supuestamente huellas dactilares para estas formas», añadió.
Los acusados muchas veces pedían más dinero a sus víctimas para «acelerar los procesos o garantizar los documentos migratorios para cierta fecha». Nunca cumplieron con ninguno de sus más de 150 clientes.
Grupos defensores de inmigrantes y funcionarios oficiales han alertado sobre los embaucadores, que se están dando un festín con el temor de los indocumentados desde que el presidente Donald Trump llegó al poder con la promesa de deportarlos y de construir un muro en la frontera con México.
El DoJ dijo en la nota que el FBI de San Diego (California) mantiene abierta la investigación y llaman a que cualquier posible víctima entre 2000 y 2017 a manifestarse.
Unos 11 millones de personas viven en Estados Unidos sin papeles, la mayoría provenientes de México.