El canciller alemán Olaf Scholz y el presidente keniano William Ruto celebraron este viernes la firma de un acuerdo migratorio entre sus países, con el que el Ejecutivo germano quiere luchar contra la falta de mano de obra cualificada y facilitar la expulsión a Kenia de aquellos ciudadanos de esa nación africana sin posibilidades de quedarse en Alemania.
El acuerdo, rubricado en Berlín por el ministro de Asuntos Exteriores de Kenia, Musalia Mudavadi, y la ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, constituye un avance «muy importante» para las relaciones entre ambos países, según Scholz.
El canciller alemán Olaf Scholz y el presidente keniano William Ruto celebraron este viernes la firma de un acuerdo migratorio entre sus países, con el que el Ejecutivo germano quiere luchar contra la falta de mano de obra cualificada y facilitar la expulsión a Kenia de aquellos ciudadanos de esa nación africana sin posibilidades de quedarse en Alemania.
El acuerdo, rubricado en Berlín por el ministro de Asuntos Exteriores de Kenia, Musalia Mudavadi, y la ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, constituye un avance «muy importante» para las relaciones entre ambos países, según Scholz.
«Para los kenianos abre perspectivas de que venga mano de obra cualificada o gente joven que venga para recibir una formación», dijo el canciller en una rueda de prensa junto a Ruto mantenida instantes después de la firma de un acuerdo, fruto del trabajo conjunto entre Berlín y Nairobi en materia de inmigración.
«Esto es algo bueno porque nos puede ayudar a paliar la falta de mano de obra, cuyos efectos ya sentimos y algo que nos va acompañar», añadió el jefe del Gobierno alemán, aludiendo a uno de los lastres a los que se enfrenta la economía germana, la mayor de la Unión Europea y la tercera a nivel mundial.
Se estima que en 2023 quedaron medio millón de puestos de empleos para trabajadores cualificados sin ocupar en Alemania, una circunstancia que costó a las empresas del país 49.000 millones de euros, según cálculos del Instituto para la Economía Alemana (IW), un centro de estudios económicos con sede en Colonia (oeste).
Talento joven keniano en Alemania
Scholz defendió Kenia como un país democrático y joven -cuya media de edad apenas llega a los 20 años- que ya cuenta con capacidad para formar al tipo de trabajadores que necesita Alemania, un país de demografía envejecida cuya media de edad está en los 44 años.
«Kenia cuenta con una población joven muy bien formada en algunos sectores, que busca poder dedicar su talento pero no tienen éxito, por eso va en el interés de Kenia y de Alemania que parte de esa gente joven cualificada tenga la posibilidad de explotar su talento en Alemania», señaló el canciller ante Ruto, que también destacó la importancia del acuerdo.
«El acuerdo que hemos firmado es muy importante, hemos negociado durante un año y hemos abordado todos los factores para asegurar que Kenia se beneficie tanto como Alemania», dijo Ruto, que defendió a su país porque, entre otras cosas, posee el «mejor capital humano del mundo».
La otra cara de la moneda migratoria
El documento firmado en Berlín también abre la posibilidad de acelerar las salidas del país de aquellos kenianos que no reúnen las condiciones legales para permanecer en Alemania, donde se estima que Kenia cuenta actualmente con unos 14.500 nacionales.
Scholz puntualizó que el acuerdo también contiene «la otra cara de la moneda», porque aquellos kenianos que no tengan derecho de estar en Alemania «pueden volver más rápidamente a su país» gracias al documento firmado este viernes.
En esta línea, Faeser manifestó su satisfacción con el texto firmado en Berlín en un comunicado en el que indicó que el Gobierno alemán quiere «imponer el retorno de las personas sin derecho a permanecer en el país, un elemento importante para limitar la migración irregular».
Ruto señaló que el texto firmado este viernes también era importante por ofrecer una oportunidad «a todos aquellos que no pueden quedarse en Alemania para que puedan volver a casa».
«Le puedo asegurar que Kenia es un país muy bonito. Ningún keniano tendrá problemas en volver a casa. Tenemos un país maravilloso», señaló.
, dijo el canciller en una rueda de prensa junto a Ruto mantenida instantes después de la firma de un acuerdo, fruto del trabajo conjunto entre Berlín y Nairobi en materia de inmigración.
«Esto es algo bueno porque nos puede ayudar a paliar la falta de mano de obra, cuyos efectos ya sentimos y algo que nos va acompañar», añadió el jefe del Gobierno alemán, aludiendo a uno de los lastres a los que se enfrenta la economía germana, la mayor de la Unión Europea y la tercera a nivel mundial.
Se estima que en 2023 quedaron medio millón de puestos de empleos para trabajadores cualificados sin ocupar en Alemania, una circunstancia que costó a las empresas del país 49.000 millones de euros, según cálculos del Instituto para la Economía Alemana (IW), un centro de estudios económicos con sede en Colonia (oeste).
Talento joven keniano en Alemania
Scholz defendió Kenia como un país democrático y joven -cuya media de edad apenas llega a los 20 años- que ya cuenta con capacidad para formar al tipo de trabajadores que necesita Alemania, un país de demografía envejecida cuya media de edad está en los 44 años.
«Kenia cuenta con una población joven muy bien formada en algunos sectores, que busca poder dedicar su talento pero no tienen éxito, por eso va en el interés de Kenia y de Alemania que parte de esa gente joven cualificada tenga la posibilidad de explotar su talento en Alemania», señaló el canciller ante Ruto, que también destacó la importancia del acuerdo.
«El acuerdo que hemos firmado es muy importante, hemos negociado durante un año y hemos abordado todos los factores para asegurar que Kenia se beneficie tanto como Alemania», dijo Ruto, que defendió a su país porque, entre otras cosas, posee el «mejor capital humano del mundo».
La otra cara de la moneda migratoria
El documento firmado en Berlín también abre la posibilidad de acelerar las salidas del país de aquellos kenianos que no reúnen las condiciones legales para permanecer en Alemania, donde se estima que Kenia cuenta actualmente con unos 14.500 nacionales.
Scholz puntualizó que el acuerdo también contiene «la otra cara de la moneda», porque aquellos kenianos que no tengan derecho de estar en Alemania «pueden volver más rápidamente a su país» gracias al documento firmado este viernes.
En esta línea, Faeser manifestó su satisfacción con el texto firmado en Berlín en un comunicado en el que indicó que el Gobierno alemán quiere «imponer el retorno de las personas sin derecho a permanecer en el país, un elemento importante para limitar la migración irregular».
Ruto señaló que el texto firmado este viernes también era importante por ofrecer una oportunidad «a todos aquellos que no pueden quedarse en Alemania para que puedan volver a casa».
«Le puedo asegurar que Kenia es un país muy bonito. Ningún keniano tendrá problemas en volver a casa. Tenemos un país maravilloso», señaló.