Un grupo de hombres armados sospechosos de pertenecer al grupo islamista Boko Haram mataron el domingo a 29 personas en el noreste de Nigeria, que vive una de las peores olas de violencia desde que empezó la insurrección islamista en 2009.
En el vecino Camerún, los enfrentamientos entre militares cameruneses y combatientes de Boko Haram dejaron también el domingo siete muertos en el norte del país.
La matanza en Nigeria tuvo lugar en el estado de Borno, un bastión del grupo islamista donde más de cien personas han muerto en los últimos días.
Los hombres armados entraron en la localidad de Mafa, un día después de tres ataques sangrientos en el mismo estado en el que murieron 74 personas.
Los insurgentes de Boko Haram, que quieren crear un estado islámico en el norte de Nigeria, así como las operaciones del ejército nigeriano contra los islamistas, han dejado miles de muertos desde 2009.
Más de 330 personas han perdido la vida en lo que va de año, uno de los balances de víctimas más importantes desde que empezó el conflicto.
Desde mayo de 2013, el ejército nigeriano está llevando a cabo una gran ofensiva contra Boko Haram, considerada por los observadores coma una fuente de violencia porque lleva a los islamistas a acciones de venganza contra los civiles.