Es muy conocido ante los medios de comunicación, Alfonso Cornejo es el relacionista público de una reconocida tienda de ropa y fragancias, un amante de los cuadros, colores sobrios y vibrantes. Cuenta con aproximadamente 65 camisas y si se enamora de un estilo puede repetirlo en diferentes colores el mismo diseño.
Un blazer azul, una camisa a cuadros con predominio del rojo y azul, unos zapatos casuales negros, cinturón negro y un jeans, es el atuendo para un día normal para este joven, y así nos recibió en un viernes de trabajo. Ama los cuadros y en su armario se nota. El orden de colores y texturas se puede apreciar, las rayas son inexistentes en sus camisas, entre mangas larga y corta, todo es un arcoíris donde no faltan los básicos: blanco y negro.
Otro de los placeres de este fashionista son los perfumes: Perry Ellis, Channel, aunque sus favorito son los Carolina Herrera. En su armario predominan al menos 25 perfumes diferentes, ubicados todos en un estante.
“Siempre ando tres perfumes dentro del vehículo. Me gustan mucho las notas frescas”, expresa.
Una habitación completa destinada a la moda es con la que cuenta Cornejo, relacionista público de Jaracandas Fashion. No es un amante de los pantalones, pero sí de los zapatos, tiene al menos 25 pares de todos los tipos aunque él prefirió no contarlos. No obstante trata, ante todo, de que estos combinen a la perfección con sus cinturones.
No puede faltar su reloj. A veces usa una pulsera y otros detalles que realzan el oufit del día. Para Alfonso un día normal de trabajo implica un pantalón formal oscuro y una camisa en tono vibrante para realzar la figura. A veces puede acompañarse de otros accesorios, otras veces no, “Ahora ya no son tan necesarias como al principio”, expresa.
“Antes tenía que agregar a mis atuendos accesorios para verme más formal en las reuniones, actualmente, a menos que el caso lo amerite tengo que usar algunos para que todo luzca más elegante”, asegura.
Confiesa que no gasta mucho en sus prendas de vestir, el también accionista de Jacarandas asegura que la mayor parte de sus piezas son obsequiadas por los proveedores de las mismas para que califique el producto, lo mismo sucede con los perfumes.
“No invierto mucho en ropa, casi toda me la regalan, quizá tengo 65 camisas. Con los perfumes también pasa lo mismo”, detalló.
Alfonso es muy diestro al momento de realizar una combinación y pecado sería que no las pudiera hacer. Su trabajo lo exige. En Jacarandas se puede apreciar tras el mostrador y muchas veces brinda asesoría a los clientes sobre sus oufit o los colores y estampados que más convienen, así como la tendencia de la temporada.
Los zapatos
Para un hombre tener decenas de pares de zapatos es todo un reto, pero para Alfonso no es tan complicado. Siempre busca comodidad al caminar, mocasines, zapatos formales de cuero y algunos deportivos se aprecian en su armario. No pueden faltar las sandalias y los plásticos conocidos como “Crocs”, aunque el aspecto “big size” característico no es parte de sus gustos. Prefiere usarlos en su versión tipo mocasín para un domingo. Le gustan por su comodidad.
Todo su armario es fashion, sin embargo, este reconocido de la moda, en su día de descanso y cuando decide no salir, se acompaña de una sudadera cómoda, grande, un fresco short y unos calcetines. Para estas eventualidades no son necesarios los zapatos. Prefiere sentirse relajado.
Los días de paseo tampoco pueden faltar. Para esos momentos usa, siempre mocasines, un pantalón cómodo, una camisa tipo Polo sin mayores detalles.
Durante muchos años se ha desempeñado como la imagen de Jacarandas y nadie más podría amar la moda como él, aunque no siempre fue así.
«Dios nos ha ayudado a levantarnos; una vez le dije a mi mami que un día íbamos a vivir en un lugar más bonito. Yo le dije a Dios que si nos concedía ese milagro iba a dar testimonio de sus bendiciones y siempre lo hago», apuntó.