Miles de fans seguían llorando este viernes la repentina muerte del cantante estadounidense Prince, pero esperaban que la autopsia realizada explique pronto qué provocó la desaparición de uno de los referentes mundiales del pop.
«Fue uno de los grandes artistas de todos los tiempos», contó a la AFP Antonio Harper, un admirador muy afectado que rindió homenaje al cantante en Minneapolis (noreste), su ciudad natal.
«No volverá a haber otro como él», aseguró sobre su ídolo, ensalzado a leyenda por su gran legado a la música.
Prince Rogers Nelson, de 57 años, fue encontrado muerto en un ascensor de su estudio situado a las afueras de la ciudad el jueves por la mañana. Los equipos de emergencia no pudieron hacer nada por reanimarlo.
El instituto forense de la región del Medio-oeste llevó a cabo la autopsia de las 09H00 a las 13H00 locales (de 14H00 a 18H00 GMT), pero no difundirá ninguna información hasta obtener todos los resultados.
«Como parte de un examen completo, se reunirán datos importantes sobre el historial médico y social (como hábitos y consumo de sustancias) del señor Nelson», señaló la institución.
Los resultados de los tests toxicológicos podrían llevar varias semanas.
El sheriff del condado ofrecerá una rueda de prensa a las 15H00 locales (20H00 GMT), durante la que podría dar detalles de la investigación.
El sitio especializado en celebridades TMZ, que dio en exclusiva la noticia de la muerte, dijo el viernes que Prince fue tratado hace menos de una semana de una sobredosis de Percocet, un analgésico que contiene opio.
Tras dar un concierto en Atlanta (Georgia, sureste), el avión privado del artista tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia el viernes 15 de abril para que fuera atendido en un hospital de Moline (Illinois, noreste).
Sus representantes dijeron entonces que la fuerte gripe contra la que llevaba varias semanas luchando había empeorado en pleno vuelo y que necesitó tratamiento para paliar la crisis.
Pero TMZ lo puso en duda. «Varias fuentes en Moline nos dicen que Prince fue llevado de urgencia al hospital y que los médicos le dieron un ‘save shot’ (inyección de neutralización, NDLR), que generalmente se administra para contrarrestar los efectos de un opiáceo».
El sitio web también afirmó que los médicos aconsejaron al cantante quedarse ingresado al menos 24 horas, pero éste decidió firmar el alta voluntaria tres horas después cuando supo que no podría quedarse en una habitación privada.