Gabriela Leite, una exprostituta de Rio de Janeiro, fundadora de la marca «Daspu» para proporcionar un ingreso regular a los trabajadores del sexo y luchar contra el estigma de la profesión, murió el jueves de cáncer a los 62 años, informaron familiares a los medios locales.
La primera colección de «Daspu» -cuyo nombre es una burla a Daslu, la lujosa boutique en Sao Paulo, y un juego de palabras con la expresión «das putas» (de las putas)- fue lanzada en 2006. A través de los años, sus desfiles de moda han atraído a los medios de comunicación internacionales.
En esta pasarela no convencional, los modelos han sido siempre prostitutas y los desfiles se han hecho en la Plaza Tiradentes, en el corazón de Rio, donde muchas de ellas trabajaban.
«Las más jóvenes que todavía se ganan la vida en la calle podrán redondear sus ingresos a fin de mes desfilando como modelos. Para las más viejas, la confección y la venta de los modelos será su única fuente de ingresos», dijo Leite a la AFP al lanzar su emprendimiento.
«Daspu barre con los prejuicios. Esto le abre el camino a la puta ciudadana», no dejó de repetir.
Los beneficios por las ventas de la marca se han reinvertido en medidas preventivas contra las enfermedades de transmisión sexual.
Leite, que había abandonado la universidad por la calle a los 21 años para «hacer su propia revolución porque era demasiado tímida», consideraba la prostitución una profesión como cualquier otra «pero con la desventaja de la discriminación».
En 1987 esta trabajadora sexual comprometida organizó la primera reunión nacional de prostitutas, y en 1992 fundó la organización no gubernamental de prevención del sida y defensa de los derechos de las prostitutas Davida, que agrupa a unas 4.500 mujeres en el estado de Rio de Janeiro.
En 2009, publicó un libro, «Hija, madre, abuela y puta», que fue llevado al teatro.
Un año después fue candidata al legislativo por los Verdes, bajo el lema «Puta Diputada», pero no fue electa. Igual, se comprometió a «seguir luchando por los derechos de las prostitutas» , recordando que en 2003 ya había presentado un proyecto de ley para regular la industria.
Una de las últimas colecciones de Daspu, la «Colección de Fútbol», puso la mira en la Copa Mundial de la FIFA 2014 en Brasil: una colección de camisetas verdes y amarillas, los colores que identifican al país, con frases impresas con doble sentido y fuerte connotación sexual.