«Mad Max: Fury Road» arrasó este domingo en las categorías técnicas de los Óscar, que dieron la sorpresa dejando sin premio a Sylvester Stallone en una noche marcada por la polémica sobre la falta de diversidad en Hollywood.
La cuarta entrega de la saga apocalíptica creada por el cineasta australiano George Miller ganó por su vestuario, maquillaje, diseño de producción, edición, sonido y edición de sonido.
La cinta pone en escena a Furiosa (Charlize Theron), una mujer que huye de las garras de un dictador para regresar a su casa tras una guerra nuclear que ha dejado el mundo sin agua.
El británico Mark Rylance fue finalmente recompensado por su papel de reparto en «Puente de espías», la película sobre la Guerra Fría dirigida por Steven Spielberg.
Su victoria dejó a más de uno con la boca abierta, ya que Hollywood preparaba desde hace semanas una fuerte ovación para Stallone, quien se habría llevado su primera estatuilla dorada por interpretar a Rocky Balboa, el personaje que le hizo famoso.
La sueca Alicia Vikander, de su lado, triunfó por su papel secundario en «La chica danesa», donde da vida a la esposa del pintor danés Einar Wegener (Eddie Redmayne), una de las primeras personas en someterse a una operación de cambio de sexo.
La gala, presentada por el humorista Chris Rock, aludía continuamente a la falta de diversidad en la industria del entretenimiento, ante la ausencia de nominados negros en las categorías principales por segundo año consecutivo.
«Estoy en los Óscar de la Academia, también conocidos como los premios de los blancos. ¿Se dan cuenta de que si nominaran a los anfitriones, yo no habría conseguido este trabajo?», dijo.
– Óscar para Lubezki –
El cineasta mexicano Alejandro González Iñárritu mantenía las esperanzas de ser uno de los grandes triunfadores de la noche gracias a «El renacido», una historia sobre venganza y supervivencia ambientada en el lejano Oeste.
El film busca el Óscar a Mejor película y Mejor actor para Leonardo DiCaprio, quien tras cuatro intentos fallidos conseguiría así su primera estatuilla por interpretar a Hugh Glass, un trampero que se hizo leyenda por sus hazañas.
«El renacido» ya coronó la carrera de su director de fotografía, el mexicano Emmanuel Lubezki, el primero en la historia de Hollywood que gana tres Óscar consecutivos después de «Birdman» y «Gravedad».
«Spotlight», que se llevó el Óscar por su guión original, llegó dispuesta a arrebatarle el premio grande.
El film narra cómo el diario The Boston Globe destapó hace más de 15 años los abusos sexuales cometidos por miembros de la Iglesia católica. Su director, Tom McCarthy y los secundarios para Rachel McAdams y Mark Ruffalo también luchan por un galardón.
«La gran apuesta», ya ganadora por su guión adaptado, es la otra gran candidata a dar la batalla.
La cinta -coprotagonizada por Christian Bale, Steve Carell, Ryan Gosling y Brad Pitt- rememora cómo un grupo de banqueros de Wall Street buscaron enriquecerse tras detectar que la economía mundial colapsaría en 2008.
«Puente de espías», «Brooklyn», «The Martian» y «La habitación» también optan al Óscar a Mejor película.
Sin sorpresa, «Inside Out» se convirtió en la Mejor película animada del año, al igual que «Amy», que se impuso como Mejor documental.
– Chile es una fiesta –
La chilena «Historia de un oso», un cortometraje de animación sobre un viejo oso que sale todos los días a la esquina de una transitada calle, dio una alegría a su país.
«Estamos muy contentos ahora mismo», dijo el cineasta Gabriel Osorio. «Quiero dedicárselo a mi abuelo, que fue quien inspiró esta historia».
«¡Viva Chile!», gritó el codirector, Pato Escala.
Colombia también quiere hacer historia y llevarse su primer Óscar a Mejor película de habla no inglesa por «El abrazo de la serpiente», un viaje al pasado para homenajear a las tribus de la Amazonía.
Su director, Ciro Guerra, ha hecho una gran campaña para darse a conocer en Hollywood, pero ante él tiene a la húngara «El hijo de Saul», la gran favorita.
Los maestros Ennio Morricone y John Williams intentarán llevarse el Óscar a Mejor música original, mientras que Lady Gaga y su colega Sam Smith harán lo mismo en el rubro de Mejor canción.
Lady Gaga subió al escenario de la mano del vicepresidente estadounidense Joe Biden para interpretar un tema con el que quiere impulsar una iniciativa contra las agresiones sexuales en los campus universitarios.