La venta de vinilos y el consumo online de música (streaming) aumentaron más del 50% en 2014 en Estados Unidos, incluso cuando las ventas totales de la industria continuaron cayendo, informó la empresa Nielsen SoundScan.
Con pocos éxitos publicados y servicios de streaming cada vez más populares, los consumidores del mayor mercado de música del mundo compraron 257 millones de álbumes el año pasado, una caída del 11% en comparación a 2013, muestran cifras de la firma de seguimiento de la industria publicadas la noche del miércoles.
Un punto fuerte de la industria fue el gran crecimiento del vinilo, que en los últimos años se convirtió en el formato elegido por los fanáticos de la música y los coleccionistas.
La venta de vinilos creció un 52% con respecto al año anterior, a 9,2 millones, el mejor año desde que Nielsen SoundScan comenzó a recolectar los datos en 1991, cuando los discos se estaban convirtiendo en un formato dominante. Sin embargo, en el total de ventas de álbumes los vinilos representaron solo el 6% el año pasado.
También las ventas de CD y las decargas de álbumes siguieron cayendo en 2014, representando el 41% de las ventas de álbumes, lo mismo que el año anterior.
Los servicios de escucha online como Spotify registraron un fuerte crecimiento: en el año hubo 164.000 millones de reproducciones de música o videos, un 54% más que en 2013.
La popularidad de Spotify y sus rivales transformó la industria de la música. Los críticos dicen que el streaming da pocos incentivos para que los consumidores compren la música y en definitiva daña a los artistas, pero Spotify argumenta que logra un crecimiento en una industria que carga con problemas desde hace años.
La mayor crítica de estos servicios fue Taylor Swift, quien hizo retirar toda su música de Spotify. Su último álbum, «1989», fue el más vendido del año en Estados Unidos (3,6 millones de copias) a pesar de haber salido recién en octubre.