La actriz estadounidense Jane Fonda reveló este viernes que fue diagnosticada con la enfermedad de Hodgkin, un tipo de cáncer que afecta al sistema linfático, pero no dejará su activismo medioambiental.
“Este es un cáncer muy tratable, el 80 % de las personas sobreviven entonces me siento muy afortunada”, escribió la artista de 85 años en una publicación en Instagram.
Fonda explicó que ya ha comenzado la quimioterapia, un tratamiento que recibirá durante seis meses, pero advirtió que no dejará a un lado su activismo.
«Créanme, no voy a dejar que nada de esto interfiera en mi activismo medioambiental», dijo Fonda, quien aseguró que los combustibles fósiles y los pesticidas causan cáncer.
“El cáncer es un profesor y estoy poniendo atención a las lecciones que me enseñará”, escribió la actriz en la red social.
La actriz también se consideró una «privilegiada» porque tiene seguro médico, a diferencia de muchos estadounidenses que tienen que afrontar el cáncer sin recibir la atención médica necesaria, lamentó.
Asimismo, aprovechó su mensaje para recordar que en noviembre se celebrarán las elecciones de medio mandato en Estados Unidos, a las que definió como «más que trascendentales».
“Pueden contar conmigo para estar juntos mientras hacemos crecer la lucha para defender el medioambiente”, acotó.
Fonda, quien ha ganado el Óscar en dos ocasiones, añadió que iniciará un tratamiento de quimoterapia por seis meses pero que no dejará que “interfiera” con su activismo climático.
Además de ser conocida por su rol en películas como Julia (1977) y Barbarella (1968), Fonda recientemente ha ganado atención por participar en protestas a favor de la acción contra la crisis climática.
La actriz ha sido arrestada varias veces por asistir a manifestaciones en Washington.