El secretario personal de Benedicto XVI, Georg Gänswein, que publica este jueves un polémico libro de memorias, deberá abandonar la residencia del difunto pontífice emérito, según informaron hoy medios católicos alemanes.
Según dichos medios, Gänswein recibió el día del entierro de Benedicto XVI un escrito firmado por el propio papa Francisco en el que se le comunicaba que debe abandonar el Monasterio Mater Ecclesiae el próximo 1 de febrero.
El pontífice emérito se había retirado allí en mayo de 2013 tras renunciar al cargo y vivía allí con cuatro amas de llaves de la asociación laica Memores Domini y con su secretario personal.
El libro de memorias de Gänswein, titulado «Nient’altro che la veritá» (Nada más que la verdad, en español) ha causado irritación dentro de los muros vaticanos, dado que no oculta las críticas al papa Francisco.
Gänswein mantiene por el momento el cargo de prefecto de la Casa Pontificia, uno de los más importantes de la Curia pero fue relevado de sus funciones tras una controversia surgida en 2020 con la publicación de un libro del cardenal Robert Sarah.
La petición de Francisco de que a partir de ese momento se ocupara exclusivamente del papa emérito le dejó «en estado de shock y sin habla», según revela en sus memorias.
También la cuestión de los arreglos de vivienda de Gänswein figura en el libro, donde relata cómo Francisco le pidió que no se mudara a la tradicional residencia del prefecto de la Casa Pontificia para cedérsela a otro inquilino, una vez que ya había comenzado con la mudanza.
La oficina de prensa de la Santa Sede informó el lunes de una reunión entre Francisco y Gänswein cuyo contenido no ha trascendido, pero algunas fuentes apuntan a que el pontífice ha pedido al secretario de Benedicto XVI discreción en los próximos días.
El alemán, de 66 años, fue colaborador leal y secretario de Georg Ratzinger desde 2003 hasta su muerte el pasado 31 de diciembre.