Por la valentía con la que tomó el proceso atravesado para conseguir su cambio de sexo, Caitlyn Jenner recibió el Premio Arthur Ashe al Valor, celebrado en Los Ángeles (EEUU).
Con evidente emoción, Jenner subió al escenario para recoger su premio. Al tomar el micrófono aprovechó el momento para enviar un mensaje de integración de las personas transexuales. «Esta transición ha sido más dura para mí que cualquier otra cosa que puedan imaginarse. Y ese es también el caso de muchas otras personas», reconoció, segura de que la decisión tomada la ha hecho vivir de verdad.
«Únicamente por esa razón, las personas transexuales se merecen algo vital. Se merecen nuestro respeto. Y de ese respeto nace una comunidad más compasiva, una sociedad más empática y un mundo mejor», agregó.
Entre el público que estuvo presente en la gala se encontraban los hijos de la exdeportista olímpica, Brody, Casey, Burt, Brandon, Kendall y Kylie -las dos últimas fruto del matrimonio fallido de Caitlyn con Kris Jenner-, y sus hijastras Kourtney, Kim y Khloé.
Así siguió hasta llegar a «la parte más dura. Me gustaría darle las gracias a mi familia», confesó Jenner.
«Mi mayor miedo a la hora de confesar mi transexualidad era herir a alguien, sobre todo a mi familia y a mis hijos. «Me he puesto a mí misma en situaciones de presión al competir en los Juegos y al formar una familia. Pero nunca había sentido tanta presión en toda mi vida como durante los últimos meses», dijo Caitlyn.