El astronauta de la NASA de origen salvadoreño Frank Rubio, que viajará este miércoles a la Estación Espacial Internacional (EEI) a bordo de la nave rusa Soyuz MS-22, confesó el martes sentirse emocionado con su primer vuelo y aseguró que en el espacio «todo le resultará interesante».
«Para mí todo resultará interesante en el espacio. Y claro está, cada 90 minutos observaremos la Tierra», afirmó en la rueda de prensa organizada por la agencia espacial rusa Roscosmos previa al lanzamiento.
El astronauta de la NASA declaró que espera con especial interés la oportunidad de llevar a cabo una caminata espacial.
«Miraré con especial atención la oscuridad del cosmos y disfrutaré la vista de las estrellas», aseguró.
Le acompañarán a la EEI los cosmonautas rusos Serguéi Prokópiev y Serguéi Petelin, con quienes tiene previsto llevar a cabo cinco caminatas espaciales, durante las cuales trabajarán en la integración del módulo de laboratorio multifuncional de la EEI con el resto de la plataforma orbital.
«Estoy muy emocionado. Nuestro trabajo es el resultado de muchos años de esfuerzos intensos, y cuando supe que volaría me sentí como un chiquillo», añadió.
Rubio afirmó sentirse orgulloso por el trabajo de sus instructores y especialistas de preparación de vuelo, y agradeció a su familia, «que todos estos años me apoyó y se sacrificó para que esto fuera posible».
«También estoy agradecido por esta posibilidad de volar, porque no muchos tienen esta posibilidad, y también estoy muy agradecido a mi tripulación», con la que compartirá 188 jornadas en el espacio, concluyó.
En la EEI la tripulación de la Soyuz MS-22 se unirá a sus predecesores, los cosmonautas rusos Oleg Artémiev, Denis Matvéyev y Serguéi Kórsakov, miembros de la tripulación 67, y los estadoundenses Kjell Lindgren, Robert Hines, Jessica Watkins, y la italiana Samantha Cristoforetti, de la tripulación Crew-4 de la nave estadounidense Crew Dragon.