Gracias a su papel en «Ingobernable», serie que le permitió regresar con fuerza a la televisión tras meses de enorme polémica, Kate del Castillo aparece nominada en los Premios Platino, aunque la actriz mexicana señaló que los galardones «no son más que una ayuda al ego».
«Tengo un cariño especial a los Premios Platino, pero en realidad los premios no son más que una ayuda al ego. Todos queremos, de una u otra manera, ser reconocidos en cualquier ámbito, en cualquier trabajo que hacemos», dijo la artista en una entrevista con Efe.
«Y es una bonita motivación, además increíble con todas las chicas con las que estoy nominada, pues me hace sentir importante, me llena de humildad y me da mucha alegría», añadió.
Del Castillo, candidata al galardón a mejor actriz de una serie de televisión, será una de las protagonistas de la quinta edición de los Premios Platino del Cine Iberoamericano, que se celebrará el próximo 29 de abril en la Riviera Maya (México).
La cinta chilena «Una mujer fantástica» lidera con nueve candidaturas los reconocimientos que promueven EGEDA (Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales) y FIPCA (Federación Iberoamericana de Productores Cinematográficos y Audiovisuales).
Del Castillo consideró que la suya no es una nominación para su trabajo sino «un apapacho (abrazo) para toda la gente» de «Ingobernable».
Además, subrayó la trascendencia que tienen los Premios Platino para unir a la industria latinoamericana.
«En lo personal me han dado conocimiento y me han sacado de mi ignorancia para saber todo lo que pasa en Latinoamérica. La maravilla del cine que existe, de actores, directores, talento en general. Desgraciadamente, de nuestros países a veces no salen las películas. Y son increíbles», indicó.
La actriz rompió una lanza por el cine hispano, ya que cuenta «nuestras historias».
«Estoy viendo un cine en mi idioma y problemas con los que yo me identifico, historias con las que me identifico, seres humanos con los que me identifico de miles de maneras y no de cartón», dijo.
Tras su controvertido encuentro en 2015 con el narcotraficante Joaquín «El Chapo» Guzmán, que posteriormente la llevó a residir de manera permanente en Estados Unidos, Del Castillo explicó que el trabajo le sirvió como refugio.
«No soy más feliz en ningún otro lugar que en un set. Para mí es un privilegio», argumentó.
El éxito de la primera temporada de «Ingobernable», una serie de intriga en la que interpreta a la primera dama de México, permitió a Del Castillo volver por todo lo alto a la pequeña pantalla, tanto que ya se ha rodado la segunda tanda de episodios.
«Como historia está mucho más sólida, más fuerte, hay muchísima acción, y seguimos tratando los problemas de México, que es lo que me gusta mucho de la serie. Si ves ‘Ingobernable’ vas a ver un México real: al México poderoso, hermoso y adinerado, y también todo lo contrario», describió.
Sin desvelar grandes detalles de los nuevos capítulos, la actriz contó sus trucos para sortear que no puede rodar en México.
«Antes teníamos que estar todo el tiempo cerraditos, todo era cerrado en mi cara, y yo tenía dobles. Era terrible. Pero ahora fuimos a un lugar que se parece mucho a México, que se pueden hacer tomas abiertas y no tuve ninguna doble, todo lo hice yo», apuntó.
Y entre sus proyectos más inmediatos figura también la continuación de «La Reina del Sur», la serie inspirada en la novela de Arturo Pérez-Reverte que la convirtió en una estrella.
«Yo iba de la mano corriendo con (el rol de) Teresa Mendoza, sufriendo con ella al mismo tiempo, y eso me marcó mucho. Además, es un personaje hermoso que creo que cualquier actriz querría interpretar porque tiene un poquito de todo: es totalmente antiheroína, una mujer malhablada, borracha, trafica con drogas, mata gente, se mete con hombres casados…», describió.
«Tiene todo eso pero la gente la adora porque no deja de ser víctima», agregó antes de subrayar su emoción por volver a este rol.
«Como actriz y como mujer siento que he madurado (…). Ahora me siento más segura, repuesta, como lista para la guerra», aseguró.
Por último, Del Castillo opinó sobre las elecciones presidenciales en México y sobre cómo pueden afectar a su situación: «Esperemos que no quede el (oficialista) PRI, de entrada, y eso ya va a ser un gran avance», dijo.
«Desgraciadamente, tenemos los gobernantes que tenemos así que es una pena por México porque es un país hermoso. A mí lo que me ha pasado es que se me han ido quitando las ganas de regresar», señaló antes de aclarar que volverá cuando se sienta «completamente segura».