La Asociación Americana de Neurología (ANA, por sus siglas en inglés), reveló en un reciente estudio que los dispositivos electrónicos de vapeo, utilizados para reemplazar el uso de cigarrillos, reducen las capacidades cognitivas del cerebro, informó el medio RT.
A partir del hallazgo, científicos de la Universidad Católica de Santiago de Guayaquil (Ecuador) realizaron la Evaluación Cognitiva de Montreal (MoCA) a 405 estudiantes hispanohablantes de entre 18 y 30 años para detectar el nivel de deterioro cognitivo, donde un puntaje de 26 puntos se considera un estado de salud cognitivo estable.
Los resultados apuntaron que los estudiantes que no fumaban ni consumían vape obtuvieron una media de 26 a 18 puntos, los fumadores de cigarrillo 25 a 18 puntos y aquellos que vapeaban constantemente una media de 24 a 16 puntos. La puntuación más baja de 24 a 8 resultó en aquellos que consumían tanto vape como cigarrillos.
El estudio también reveló que aquellos estudiantes que daban entre 10 y 20 caladas al día con vaporizadores electrónicos tenían capacidades cognitivas 9,2 % más bajas que los no fumadores, mientras que los que daban más de 20 caladas diarias tenían un rendimiento un 13,7 % inferior.
El efecto del vapeo en el cerebro se adjudica a la reducción del flujo sanguíneo y oxígeno al cerebro, a lo que se suma la neurotoxicidad que provoca la nicotina que daña las células cerebrales.