La Casa Blanca informó el lunes que espera contar con 1,000 millones de dólares para financiar una nueva iniciativa develada recientemente por el presidente estadounidense Barack Obama y que busca eliminar el cáncer.
Este dinero debería «garantizar que las mejores investigaciones que se están realizando tengan el financiamiento que necesitan», dijo el vicepresidente Joe Biden.
«Nuestro trabajo es eliminar los escollos burocráticos y permitir que la ciencia se desarrolle», añadió en un comunicado.
En su discurso sobre el estado de la Unión, el mes pasado, Obama había pedido a su vicepresidente que asumiera el control de esta iniciativa nacional contra el cáncer bautizada «Moonshot», en referencia al programa Apolo de conquista de la luna. Su hijo, Beau Biden, murió de un tumor cerebral a los 46 años en 2015.
Ya se han adjudicado 195 millones de dólares a los Institutos Nacionales de Salud (NIH, por su sigla en inglés) para que puedan comenzar a trabajar inmediatamente en nuevas investigaciones sobre el cáncer, dijo a periodistas un alto funcionario del gobierno.
Obama pedirá 755 millones de dólares adicionales en su proyecto de presupuesto 2017, que comienza el 1 de octubre y que será sometido a consideración del Congreso el próximo 9 de febrero. Estos fondos irían básicamente a los NIH y a la FDA, la agencia estadounidense que controla los medicamentos.
Esta nueva iniciativa se concentra en particular en el desarrollo de vacunas contra el cáncer, en su detección precoz y en nuevos tratamientos para erradicar la enfermedad, como la inmunoterapia, que consiste en estimular el sistema inmunológico para destruir las células cancerosas.
La Casa Blanca busca además mejorar el intercambio de datos entre los científicos, el análisis genómico de los tumores y la investigación de formas pediátricas inusuales de cáncer.
Cerca de 14 millones de personas en el mundo son diagnosticadas de cáncer anualmente y unas ocho millones mueren, según la Organización Mundial de la Salud.