El Salvador
lunes 25 de noviembre de 2024

«Romeo y Julieta», una obra por Skype sobre el amor imposible en Siria

por Redacción


Romeo es un joven sirio refugiado en Jordania y su amada está atrapada en la región de Homs, por lo que su único medio para comunicarse es Skype y otras plataformas de internet.

Un Romeo herido y refugiado en Jordania. Una Julieta atrapada en Siria, asediada por las fuerzas del régimen. Gracias a Skype, dos niños interpretan a Shakespeare en una adaptación libre de «Romeo y Julieta», en la que cuentan una vida rota por la guerra.

Romeo es un joven sirio refugiado en Jordania y su amada está atrapada en la región de Homs, por lo que su único medio para comunicarse es Skype y otras plataformas de internet.

Su historia de amor se desarrolla con él frente a una pantalla de ordenador y las imágenes de su Julieta particular, que él recibe por Skype, proyectadas en una pantalla por la que van desfilando varios actores.

Interpretada en la azotea de un improvisado hospital para refugiados sirios en Ammán, capital de Jordania, la obra ahonda en el sufrimiento de los que tuvieron que escapar de la guerra civil siria y también de los que quedaron atrás.

«Con esta obra única, queríamos poner el foco de atención en las zonas sirias sitiadas por el régimen tras el fracaso de las organizaciones humanitarias para enviar comida, agua y medicinas», dijo el director de la obra, el actor sirio Nawar Bulbul.

«También queríamos enviar un mensaje al mundo de que las personas sitiadas no son terroristas, sino niños amenazados por los bombardeos, la muerte y la destrucción», agregó.

El Romeo de la obra es Ibrahim, un niño de 12 años que perdió a su madre y tres de sus hermanos en un bombardeo del régimen sobre Damasco el año pasado.

Tres operaciones en su pierna derecha lo salvaron de la amputación, pero el camino de la recuperación es tedioso y requerirá dos operaciones más.

Su Julieta es una niña de 14 años privada de ayuda y de su familia, una de los 440.000 civiles que, según la ONU, están atrapados en el conflicto sirio en zonas sin acceso a ayuda humanitaria.

La identidad de Julieta y su localización exacta son secretas, por seguridad, y durante toda la actuación luce un velo.

‘Ya no hay amor en Siria’

Los problemas concretísimos del mundo real se entrometen a menudo en la pieza, con los frecuentes cortes de internet y de electricidad de Homs, que a veces interrumpen la obra.

En una actuación, los espectadores tuvieron que esperar una hora antes de que la imagen del balcón de Julieta apareciera para que Romeo pudiera declarar su amor.

Bulbul dijo que cree que su obra es la primera que utiliza Skype de esta manera. El actor reescribió la pieza sustancialmente para eliminar la violencia y centrarse en la historia de amor.

Ya en 2014, Nawar Bulbul trabajó con niños la obra  de William Shakespeare «El rey Lear», que produjo en el campo de refugiados de Zaatari, en el norte de Ammán, donde viven unos 80.000 sirios.

«El objetivo era humanizar e inspirar a los niños a través del arte. Usar el arte como una vía de escape para su angustia, su tristeza y su dolor», dijo Bulbul a la AFP.

Ibrahim aseguró que tras varios meses de ensayos, ha crecido junto a los que están del otro lado de la cámara. «Espero verlos un día cara a cara, una vez la guerra haya terminado», dijo.

Para el público, compuesto en gran parte por refugiados sirios, la obra les ha acercado todo lo que su país ha perdido en los últimos años.

«Ya no hay amor en Siria como el de esta historia. La guerra destrozó todo lo que era bello en mi país», dice Mohamed Halima, un refugiado de 24 años que recibe tratamiento tras haber sido víctima de cinco disparos hace dos años en Siria. Ahora se desplaza en silla de ruedas.

«Nosotros, los hombres jóvenes, somos las mayores víctimas de esta guerra descabellada, todo el mundo tenía una historia de amor con alguien», declaró Halima.

«Pero ahora no sabemos donde están ni tampoco si siguen con vida».