Sigfrido está viejo y enfermo. Le quedan pocos meses de vida. Se junta con su viejo amigo Lorenzo, a quien decide venderle su casa. Con ese dinero quiere cumplir los sueños que la vida engavetó. El reencuentro con Lorenzo depararía una hazaña, un sinsentido y un delito, todo al mismo tiempo: deciden llevar a cabo un asalto, acaso, para ellos, un mecanismo de lucha contra el olvido social y un acto de reafirmación ante el mundo.
Estamos hablando de “La extinción de los dinosaurios”, la pieza teatral humorística, irreverente y mordaz de Luis Ayhllón, que inaugura, a partir del 13 de marzo, la temporada 2014 del Teatro Luis Poma. Su director, Roberto Salomón, ha decidido mantener la expectativa durante todo el año: habrá 20 espectáculos divididos en tres actos. Por el momento solo se ha revelado el primero, que finaliza el 30 de abril. En este primer bloque de la temporada se presentarán tres puestas en escena.
“La extinción de los dinosaurios”, es una punzante reflexión sobre la amistad, la mentira y la vida como valor en sí mismo. Reúne a dos de los más curtidos actores del país y su escenario presenta la conceptualización visual de Rossemberg Rivas.
Luis Ayhllón, de madre salvadoreña y autor de la obra, ha sido uno de los más laureados en su generación en México y sus más de 20 obras se han estrenado en distintos países Latinoamericanos.
Se presentará después la comedia social “Pareja abierta” de Franca Rame y el Nobel de Literatura Dario Fo, producida por el Teatro Memorias de Honduras.
Por último veremos “La razón blindada”, de Arístides Vargas, puesta en escena a cargo del 24th St. Theatre, de Los Ángeles California.
La segunda temporada se desarrollará de mayo a agosto y la última desde septiembre al 20 de diciembre. Sobre estos dos actos se revelarán más detalles en el transcurso del año
Una temporada con dos novedades
El público salvadoreño podrá ver 180 funciones durante todo el año de países como Italia, Costa Rica, México, Argentina, Francia, España, Ecuador, Uruguay y por supuesto, El Salvador.
Una de las diferencias importantes en relación con otros años es que el lobby del teatro, usualmente utilizado para exhibiciones de artistas plásticos, mostrará un recorrido por sus 10 años de historia, con cinco exposiciones fijas y una itinerante, conceptualizadas por las artistas Ana Carolina Olmedo y Catalina del Cid.
Por primera vez se programarán tres talleres de teatro para profesionales. El primero será de títeres para actores, impartido por el Sandglass Theater de Vermont, EE. UU. Después el actor salvadoreño, formado en México y Francia, Pablo Castels, dará un taller de interpretación; finalmente el taller de dramaturgia por parte de Luis Ayllhón, mexicano de origen salvadoreño.
Pero lo más notable es que, de las 20 presentaciones solo 3 de ellas serán de compañías extranjeras. Para Salomón, es un reflejo del crecimiento del arte escénico en el país en los últimos 10 años.
“No es una decisión forzada. Una de las cosas importantes que hay que saber es que el teatro se construye. Uno no puede pensar que solo por haber hecho una obra la gente va a hacer cola para ir a verla. Hay que construir los actores, los directores, el público, tener los espacios, buscar el financiamiento. Por eso hay que rescatar que desde la firma de los acuerdos de paz se vengan formando los grupos y no es ninguna coincidencia que las cosas vayan dando resultados”, subrayó.
Para seleccionar las obras de cada temporada se valora lo que ofrece el medio, y la presencia de artistas extranjeros depende de los contactos que se tienen en el exterior para traer grupos que quieran venir. Según Salomón, lo que ha sucedido en los últimos dos años se ha presentado todo espectáculo que se haga con calidad en El Salvador y, por supuesto que deseen presentarse ahí, “porque hay compañías que desean mantenerse en cartelera tres meses”. Uno de los rasgos característicos de este teatro es que es itinerante.