«Frida y Diego vivieron en esta casa», dice la frase pintada en letras amarillas sobre la pared azul en el corredor acristalado y lleno de plantas exuberantes. Podría ser la ciudad de México, pero es el Jardín Botánico de Nueva York y su original muestra sobre la pintora mexicana.
«Frida Kahlo: Arte, Jardín, Vida», abierta el 16 de mayo y que se extenderá hasta el 1 de noviembre próximo, tiene como eje una instalación de plantas y flores reimaginando el estudio y jardín de la artista y su marido, el muralista mexicano Diego Rivera, en la célebre Casa Azul de Coyoacán.
«Nos inspiramos en el arte de Frida Kahlo pero también en el arte de su jardín. Sabíamos por haber estudiando sus pinturas que era una cuidadosa observadora de la naturaleza y las plantas, pero lo que aprendimos estudiándola más es que también era una persona muy apasionada por las plantas», señaló a la AFP Joanna Groarke, curadora del Jardín Botánico de Nueva York, situado en Bronx (norte).
La Casa Azul, actualmente el Museo Frida Kahlo, perteneció a la familia de la artista desde 1904 y ella vivió allí con Diego Rivera con intervalos entre 1929 y su muerte en 1954. Cuatro años más tarde, la propiedad fue convertida en museo.
Los curadores del Jardín Botánico y la curadora invitada Adriana Zavala ambientaron el bello invernadero Haupt, de hierro forjado al estilo del Palacio de Cristal de Madrid, con plantas pertenecientes a la colección de la institución y otras traídas desde diferentes partes del mundo.
La instalación incluye una esquina dedicada al estudio de Kahlo y una réplica de la pirámide de la Casa Azul, creada originalmente para exhibir la colección de arte prehispánico de Rivera y que muestra aquí macetas tradicionales con cactus y suculentas mexicanos.
«Con Frida era una oportunidad de examinar su obra a través de un mundo completamente nuevo», explicó Groarke, curadora de contenido interpretativo para el público, recordando que el Botánico ya ha hecho muestras similares sobre la relación entre arte y naturaleza dedicadas a otras figuras como Charles Darwin, Emily Dickinson y Claude Monet.
– Cinco años de preparación –
Los trabajos de preparación «llevaron casi cinco años» en colaboración con diferentes instituciones de México, como el Museo Dolores Olmedo de Xochimilco, dijo Groarke, quien destacó la importancia de presentar a Kahlo en Nueva York.
«Ella es extremadamente conocida aquí en Estados Unidos. Estamos muy entusiasmados de ser capaces de ofrecer una visión un poco diferente», precisó la encargada de contenido interpretativo para la participación del público.
Además de la Casa Azul, la muestra presenta en una de las galerías del Botánico más de una docena de pinturas y dibujos de Kahlo, cuya vida y obra han sido objeto de varias películas, incluyendo una en 2002 interpretada y coproducida por Salma Hayek.
Su exuberante biografía, sus amantes y amigos famosos, como León Trotsky y André Breton, ocultaron su trabajo artístico y Kahlo nunca llegó a saborear el reconocimiento que le reservó la posteridad, y que a partir de los años 80 la convertiría en una de los pintoras más cotizadas de América Latina.
Una particularidad de la exposición es que por primera vez despliega toda la información en inglés y español.
«Sabemos que nuestros visitantes llegan de todos lados para esta muestra y queríamos ser capaces de alcanzar una audiencia más amplia», afirmó en ese sentido Groarke.
La inmersión en la cultura mexicana es completa, con paneles con poesías sobre plantas y flores de México del premio Nobel de literatura Octavio Paz, conferencias, gastronomía, actividades para niños y veladas especiales con música y danza.