El diario oficial Granma recordó este martes el centenario de Ñico Membiela, uno de los grandes boleristas cubanos, que fuera borrado de los medios después de que emigrara a Estados Unidos en la década de 1960.
«En una época de triunfo para el bolero en las interpretaciones del inmenso Beny (Moré)y de Vicentico Valdés, Blanca Rosa Gil, Rolando Laserie, Fernando Álvarez, Orlando Vallejo y Orlando Contreras, Membiela consiguió que a lo largo de 1960 nadie permaneciera ajeno a su combinación Contigo-Besos salvajes», señala el periódico.
Alto, delgado, de estricto cuello y corbata, y pelo engominado, Membiela nació en Zulueta (centro) el 3 de diciembre de 1913, y es desconocido actualmente por la mayoría de los cubanos, nacidos tras el triunfo de la Revolución de Fidel Castro, en 1959.
Granma emplea un giro reconciliador para la conmemoración:
«Cuentan que fueron desoladores los momentos finales de Membiela, atado a una silla de ruedas en un hospicio de Hialeah (Florida, sureste de EEUU) donde murió a los 84 años de edad, con la idea fija de que algún día regresaría a Zulueta (centro de la isla) (…). Pero ahí está su manera de cantar boleros, algo que no debemos olvidar».
Como otros artistas emigrados, Membiela fue retirado de la radio, televisión y venta de discos(todos bajo control del Estado), práctica de la que solo se salvó Vicentico Valdés (1921-1995), quizás porque se abstuvo de hacer activismo o declaraciones políticas.
La famosa Celia Cruz (1925-2003) fue incluida en algunos programas musicales de la radio después de su muerte.
Incluso emigrados más recientes, que también fueron ignorados, comenzaron a volver, sino por la radio, al menos por el aeropuerto y los salones.
El el caso de los directores de orquestas y cantantes Manolín, el Médico de la Salsa e Isaac Delgado, quien participó en conciertos con Silvio Rodríguez en barrios de La Habana.
El caso más nuevo fue el de la roquera Tanya Rodríguez, muy popular en la isla en la década de 1980, quien regresó a Cuba en noviembre tras 20 años de ausencia, y actuó con los hermanos David y Ernesto Blanco, según una reciente entrevista que concedió a la revista cultural La Jiribilla.