miércoles 30 de octubre del 2024

En Asamblea Legislativa habían instaurado corrupción al más alto nivel

por Redacción


Presidente del Órgano de Estado anunció que no se renovarán contratos que vencieron el 30 de abril y que eran empleados de confianza de las fracciones anteriores.

El presidente de la Asamblea Legislativa, Ernesto Castro, reiteró este jueves que las acciones para reestructurar el funcionamiento de dicho Órgano de Estado y privilegiar la austeridad, continúan, y aseveró que gestiones pasadas habían instaurado corrupción “al más alto nivel”.

«Esta es una institución donde habían instaurado la corrupción al más alto nivel, se repartieron el pastel como ellos quisieron y eso no puede seguir así. No hemos venido a tratar mal a nadie sino a hacer justicia, por el pueblo», mencionó Castro en declaraciones a la prensa.

Además agregó: “Todos somos empleados de la Asamblea, a todos nos pagan con dinero público y nos debemos a los ciudadanos ¿Habrá todavía otro sector que quiera encubrir la corrupción que ocurrió desde hace años?”.

Todo lo anterior, en respuesta a algunos señalamientos que empezaron a surgir, por denuncias de remoción de personal. Al respecto, Castro explicó que se trata en su mayoría de personal de confianza de fracciones pasadas, especialmente ARENA y FMLN.

“¿Cómo vamos a dejar a la gente contratada por ARENA y FMLN? Se tienen que acabar las plazas de confianza”, cuestionó Castro, quien detalló que en total, 1,019 personas terminaron contrato el pasado 30 de abril.

En ese sentido, envió un mensaje de tranquilidad al Sindicato de Trabajadores de la Asamblea Legislativa (SITRAL), en el sentido que solo se está revisando los casos de las plazas de confianza y las personas con contratos expirados, a la vez que se dijo anuente a dialogar con la unión de trabajadores. 

De igual forma, negó que se ejecute una cacería de brujas al interior de la Asamblea, sino que estas acciones de reestructuración, constituyen un “acto de justicia que jamás se había hecho”. 

Durante la Sesión Plenaria del pasado martes, Castro anunció un plan de austeridad para reducir el gasto legislativo en $7 millones, mediante la renuncia a bonos salariales y uso de vehículos asignados por el legislativo, además de supresión de plazas de confianza y otras aquellas que pueden considerarse como “fantasmas”.

El pasado miércoles, se ordenó a la Comisión de Hacienda y Especial del Presupuesto, estudiar el dinero erogado por este órgano a oenegés, y así terminar con esta práctica de financiamiento. 

Según información compartida por Castro, por años se ha entregado más de $159 millones a estas organizaciones, a las cuales dijo que se contactará, para que informen sobre sus actividades y explicar por qué reciben fondos legislativos. 

Castro no descartó que se emprendan acciones penales con oenegés, personas vinculadas a plazas fantasmas y empleados que favorecieron a grupos de poder, a la vez que insistió en que se convocará a una auditoria externa para determinar el estado de la administración en la Asamblea.