El ayuntamiento de Madrid ha elaborado un nuevo plan para erradicar los comportamientos incívicos en los espacios públicos que introducirá multas por solicitar los servicios de prostitución en la calle, dijo un portavoz municipal este miércoles.
Según este proyecto, las multas por este tipo de conducta serán de 750 euros (1.000 dólares), que podrían subir hasta 3.000 euros en caso de que se produzca cerca de escuelas y centros comerciales.
El texto también introduce multas de entre 1.500 y 3.000 euros a aquellos que se ofrezcan en el espacio público a trasladar toxicómanos a puntos de venta y consumo de estupefacientes.
Esta medida va dirigida a los llamados «taxis de la droga», personas que acuden con sus coches a una céntrica rotonda de Madrid para recoger a drogadictos y llevarlos, a cambio de una tarifa, a un barrio de chabolas en las afueras para comprar estupefacientes, dijo el portavoz.
«Había una preocupación generalizada y la obligación del gobierno municipal es de regular el espacio público lo más posible», añadió.
El proyecto también reúne en una misma ordenanza multas ya existentes por mendigar con una actitud coactiva o de acoso, orinar en la calle, dormir en bancos públicos, tirar basura, entre otras.
Pedir en las puertas de escuelas y hospitales o tirar basura al suelo puede conllevar multas de hasta 750 euros, mientras que orinar en la calle se sanciona con entre 750 y 1.500 euros.
«El objetivo de esta ordenanza es el de preservar el espacio público como lugar de convivencia y civismo», señala el documento en su introducción.
La ordenanza ha sido redactada por el ayuntamiento municipal, gobernado por el conservador Partido Popular, tras un proceso de consulta con grupos cívicos y asociaciones de empresarios.
El proyecto ha sido entregado a los partidos municipales de la oposición, quienes pueden sugerir cambios antes de votar la versión final a principios de 2014.