El exobispo católico, Guillermo Abanto, quien fuera obispo auxiliar de Lima, reconoció este sábado en un comunicado público ser padre de una niña de dos años y dijo que ha invitado a la madre a una conciliación para determinar el monto de pensión en favor de la menor y el régimen de vistas.
«Invoco a la señora Alexandra de la Lama a concurrir a una audiencia de conciliación por ser de interés primordial de la menor, así como también a que cese en el uso innecesario de los medios de comunicación para tratar asuntos de índole familiar y personal que en un futuro puedan afectar gravemente el desarrollo de la vida de nuestra hija», señala el exobispo.
Abanto precisa que busca evitar que se inicie un nuevo proceso judicial por alimentos, y que ante la invitación cursada hasta el momento no ha recibido respuesta alguna.
En el comunicado, en que por primera vez se dirige a la opinión pública, indica que hace más de dos años procreó con la señora de la Lama una niña y que nunca ha negado la paternidad «ni mucho menos me he desentendido de las necesidades de mi menor hija».
«Además vengo tratando de llegar a un acuerdo extrajudicial con su madre para determinar de la forma más armoniosa y rápida posible su pensión alimentaria y el régimen de visitas», agrega.
El pasado miércoles el Poder Judicial declaró que el exprelado Abanto es el padre de una menor de dos años, cuya madre había presentado una demanda para que reconociera a su hija.
La resolución del Tercer Juzgado de Paz Letrado también ordena al organismo de registro de identidad a que inscriba «la filiación extramatrimonial» de la pareja y la identidad de la menor con nombres y apellidos.
Un día después la Conferencia Episcopal Peruana (CEP) reprobó «el comportamiento de quien fuera obispo auxiliar de Lima, Guillermo Abanto, a quien la Santa Sede le retiró el ministerio».