(AFP) – El gobierno británico informó el martes que un británico fue detenido en Nairobi tras el ataque a un centro comercial que dejó al menos 67 muertos.
«Podemos confirmar la detención de un ciudadano británico en Nairobi», dijo una portavoz del ministerio de Relaciones Exteriores (Foreign Office), añadiendo que se estaban llevando a cabo gestiones «para ofrecer la asistencia consular rutinaria».
La portavoz no quiso precisar si la persona detenida estaba relacionada con el asalto.
«Estamos al tanto de las versiones sobre la presencia de un ciudadano británico entre los terroristas y estamos examinándolas, pero no vamos a especular», afirmó la portavoz.
«No puedo dar más detalles por el momento», agregó, sin precisar tampoco si se trataba de un hombre o una mujer.
La ministra de Exteriores keniana, Amina Mohamed, había dicho el martes que una ciudadana británica figuraba entre los asaltantes y sugirió, sin nombrarla, que podría tratarse de Samantha Lewthwaite, de 29 años, hija de un militar británico y viuda de uno de los autores de los atentados de Londres.
Apodada «la viuda blanca», Lewthwaite es una musulmana conversa que estaba casada con Germaine Lindsay, uno de los cuatro suicidas que perpetraron los atentados contra el transporte público de Londres en julio de 2005, matando a 52 personas.
Esta madre de tres hijos era buscada por la policía keniana desde antes del asalto al centro comercial Westgate por sus presuntas relaciones con la organización Al Shebab, próxima a Al Qaida, que ha reivindicado el asalto.
Sin embargo, el presidente keniano, Uhuru Kenyatta, dijo el martes por la noche que no podía confirmar «por el momento» esa versión. Al Shebab, por su parte, desmintió «categóricamente la implicación de una mujer».
Kenyatta anunció la detención de once sospechosos del ataque y la muerte de cinco.
Los servicios de inteligencia británicos han advertido de la presencia de británicos en Yemen y Somalia para recibir entrenamiento.
Jermaine Grant, un converso musulmán londinense de 30 años, fue juzgado esta semana en la ciudad keniana portuaria de Mombasa acusado de vínculos con Al Shebab.
Uno de los sospechosos del asesinato de un soldado británico en las calles de Londres en mayo, Michael Adebolajo, también fue detenido hace tres años en Kenia pero no fue acusado.