«Hemos recibido los cuerpos de 21 personas» desde el inicio de las protestas el lunes, declaró una fuente en el hospital Omdurman, a orillas del río Nilo, enfrente de la capital Jartum.
Ocho personas más han perdido la vida en otras partes del país, según testigos y familiares.
Los manifestantes convocaron nuevas manifestaciones el jueves en la capital, donde las fuerzas antidisturbios estaban desplegadas desde la mañana en los principales cruces, según un corresponsal de la AFP.
Los manifestantes, que quemaron neumáticos para bloquear las calles, paralizaron el miércoles la capital.
Frente a la extensión de los disturbios, la embajada de Estados Unidos en Jartum instó a «todas las partes a no recurrir a la fuerza y a respetar las libertades públicas y el derecho a la concentración pacífica».
Las autoridades de Sudán, por su lado, anunciaron el cierre de las escuelas en la capital hasta el 30 de septiembre.
La conexión a Internet continuaba cortada el jueves, según varios usuarios, pero era imposible determinar si se trataba de una avería o de un corte deliberado por parte de las autoridades.