Sin piedad inició su participación en el Premundial de Concacaf, la Selecta Playera, al arrollar 1-15 a República Dominicana en partido que se esperaba tuviera el ingrediente extra del duelo de hermanos, Frank Velásquez frente a Homer Velásquez, pero el seleccionador no pudo debutar en el banquillo del equipo caribeño por COVID-19.
En el partido figuraron los nacionales Rubén Batres, con un póker de goles, además de Frank Velásquez y Jason Urbina, con sendos tripletes en la masacre sobre los dominicanos.
Tras un arranque explosivo con un aluvión de llegadas por parte de El Salvador, con ocasiones de Exon Perdomo, los guerreros encontraron el primero gracias a un gol de antología de Rubén Batres, al tirar a marco de chilena, cuando apenas habían transcurrido tres minutos de juego.
Un minuto después, llegó el segundo con la firma de Frank Velásquez, quien volvió a aparecer al minuto 6 con un disparo que se coló en el primer palo del portero dominicano Miguel Rojas, para anotar su doblete.
El festín continuó con otro aporte de Darwin Ramírez, a pase de Agustín “Tin” Ruiz al minuto 8, luego apareció el veterano Elmer Robles para anotar el quinto gol de El Salvador y a un minuto del final del primer período volvió a figurar Rubén Batres con su doblete.
En el segundo período continuo sin piedad la Selecta Playera que, en apenas cuatro minutos de juego, ya había sumado dos tantos más por intermedio de Andrés Cruz y Jason Urbina y luego, al minuto 9, colocó un golazo Heber Ramos y a un minuto del final apareció Exon Perdomo para colocar el 10-0 antes de irse al segundo descanso.
En el último período figuró Urbina sellando una gran tarde con triplete, con gol de chilena incluido, al minuto 2, y otro más en el que mostró gran destreza mental, al 4′. Después apareció Frank Velásquez con otro triplete en su cuenta personal al minuto 5, y cerró de gran forma Rubén Batres con un póker de goles en sus pies, al aportar otros dos tantos en los minutos finales del encuentro.
Por República Dominicana descontó Noel Navarro, gol que significó al menos el de la honra en una tarde para el olvido para los caribeños.