Es uno de los periodistas mexicanos más polémicos que trabajan en ESPN Deportes. Con sus declaraciones, se encarga de denunciar los males del fútbol mexicano, su principal tema de experticia, ya sea a nivel de clubes como en selección nacional.
Pero la mirada del periodista Rafael Ramos Villagrana va más allá del fútbol de su país natal, y muestra conocimiento de la realidad del balompié de la región de CONCACAF, confederación a la que pertenece México.
Ramos habla sin tapujos sobre los malos manejos en el fútbol mexicano a nivel federativo y también se ha informado de lo que pasa con la Federación Salvadoreña de Fútbol (FESFUT) y el ambiente del fútbol en El Salvador, del cual hace un breve pero honesto análisis.
En plena faena de atender los tres programas en los que tiene participación para ESPN Deportes, los cuales se graban en El Salvador desde la azotea del Edificio Bicentenario de la Red Salvadoreña de Medios (RSN), Ramos Villagrana compartió su visión para Diario1 acerca del partido eliminatorio de este viernes entre aztecas y salvadoreños, así como la triste realidad del fútbol en ambos países:
¿Ya había estado antes en El Salvador para cubrir a la selección mexicana y que impresión le deja el ambiente con el que fue recibido “El Tri”?
Es mi segunda vez en El Salvador y siento que el ambiente es menos hostil que en otras veces, debido obviamente a los resultados previos que ha tenido El Salvador.
No siento que México sienta exigencia al venir a este partido. Está claro que después del 7-0 ante Chile, el futbolista mexicano quiere lavarse la cara y terminar con un rostro nuevo para la hexagonal, pero hace falta esa exigencia. Yo no vi que los jugadores se intimidaran. Los partidos contra la selección de El Salvador que dirigía Carlos de Los Cobos eran partidos en los que sentías que la tribuna influía en el partido. Yo espero que el estadio esté lleno y que los salvadoreños recuperen la fe en su selección.
¿Qué expectativa tiene la prensa y la opinión pública mexicana de este partido, considerando los tristes resultados previos que ha tenido “El Tri”?
Creo que al final de cuentas, si existe mucha exigencia hacia la selección mexicana, pero en cuanto al manejo de los medios es muy distinto. Hay medios que le están exigiendo a México que tenga una actuación notable, hay otros que dicen que no se puede fallar ante un equipo como El Salvador, y yo creo que esa soberbia y petulancia de ver de menos a la zona centroamericana, le ha costado caro a México, a tal punto de complicarse las últimas dos eliminatorias mundialistas.
Es una selección que no ha ganado nada, salvo la medalla de oro olímpica y algunos mundiales sub-17, pero a nivel de selección mayor, no tiene derecho de mirar hacia abajo a nadie.
Es el segundo partido ante El Salvador que tiene México en esta fase eliminatoria y viene sin muchas de sus mejores piezas ¿A qué aspira México?
Esta selección debe aspirar a lo que aspiran todos, que es ganar, pero da la impresión que todavía el futbolista mexicano viene traumado, porque pese a ser una generación de jugadores muy buena, muchos se van a retirar con el recuerdo de que fueron parte de la generación del 7-0.
El talento del futbolista mexicano es innegable, pero siempre he creido que ellos necesitan mucha ayuda mental. Como diría el exseleccionador mexicano Manuel Lapuente: El futbolista mexicano necesite que se le hable todo el día, todos los días y antes de cada partido para convencerlo de que es capaz de conseguir lo que quiera. Los que lo consiguen son los futbolistas maduros, pero ¿Cuántos futbolistas demuestran esa madurez a tiempo?
¿Cree que ese trauma de la que habla, producto del 7-0, se ha extendido a otros estratos del deporte, para llegar al plano federativo?
En México somos muy dados a reírnos de nosotros mismos, nos hemos burlado del 7-0, porque hemos aprendido que las heridas, antes de cerrarlas, hay que hurgarlas lo más que se pueda para encontrarle un saborcito, porque el mexicano no tiene mayor placer que compartir la desgracia, antes que la alegría. Entonces en la afición no hay tanto daño y los medios ayudamos un poco al regocijo.
Lamentablemente, la Federación Mexicana de Fútbol es un portento de cinismo y no han hecho nada, no se movió de ninguna manera y como agresión adicional te anuncian que los equipos mexicanos van a poder ocupar hasta 10 jugadores extranjeros en sus plantillas, y cuando quieras hacer un recuento de tus jugadores para la próxima generación olímpica, no sé de dónde los van a sacar.
Además de los malos resultados previos y los problemas federativos ¿Qué sabe de la selección salvadoreña que enfrentará a México?
Yo me he enfocado mucho en ello y todavía sigo esperando que algún órgano del gobierno haga una auditoría real a la FESFUT sobre cuántos millones de dólares le ha entregado la FIFA por años, y en donde los ha colocado, qué provecho les ha sacado para el fútbol salvadoreño.
En el estadio vi que había un lugar que decía: “estacionamiento exclusivo para accionistas”. Yo me pregunto: ¿qué accionistas puede tener el fútbol salvadoreño, cuando carece de tanto apoyo para desarrollar un balompié profesional? Porque pasión existe en este país, pero tú te preguntas a donde ha ido a parar ese dinero y que de oscuro hay en el manejo del mismo, porque tienen anunciantes importantes, pero si malbaratan la selección, empezando por el malbaratado criterio de la FESFUT, ahí empieza el domingo.
¿Algo no muy distinto a lo que sucede en México?
Lo que sucede en México es que maneja $650 millones para un proceso de copa del Mundo, el problema es, que a pesar de eso, y lo dijo muy bien Ramón Maradiaga, el fútbol mexicano es un millonario triste, porque con todo el dinero que tiene y las instalaciones que tienen equipos como Atlas, Pachuca o Chivas, no se pueden producir jugadores porque hay corrupción entre los directivos, que dejan que promotores dejen entrar bultos al fútbol mexicano.
Guillermo Lara, un promotor de jugadores que fue declarado persona non-grata por el Consejo Directivo de la Federación Mexicana de Fútbol, ahora es la mano derecha del presidente de la Federación y se le ha denunciado públicamente por haber estado en relación directa con gente del narcotráfico, falsificación de papeles y otro tipo de documentos, etc.
Cuando tienes a alguien así, encargado de manejar los partidos amistosos de la selección mexicana, te habla de la podredumbre moral de la Federación Mexicana de Fútbol, pero la culpa es de los dirigentes, porque si dejan que alguien los pise de esa manera, no pasa nada.
¿Qué le parece el elogio del seleccionador mexicano, Juan Carlos Osorio, a varios jugadores de la selección con nombre y apellido?
Osorio tiene un grupo de personas que supervisan videos y examinan al adversario con mucho detenimiento, entonces cuando él llega a las conferencia de prensa, él lee las anotaciones sobre los jugadores y tiene gente que le investiga, pero también investigaron contra Chile y no sirvió de nada.
Eso es una forma de decirle al adversario que lo respeta y él lo hace para hacerle creer a la prensa local que conoce perfectamente al adversario.
¿Es perjudicial para México que no haya tenido encuentros amistosos después del 7-0 ante Chile?
Si se fijaron en la conferencia de prensa, previo al partido contra El Salvador, El Salvador mencionó en varias ocasiones Chile, pero no mencionó el 7-0 y parecería que es parecido a un fantasma que no quieren invocar y que les da miedo. Entiendo que parte de la terapia para mejorar es admitir el error, pero ahora dice que tiene un “plan B” y que ha tenido “varias reuniones”. Lo que me parece es que se ha dedicado más a rescatar el equipo anímicamente, que futbolísticamente.
¿Esperarías que El Salvador sea capaz de darle una sorpresa a México, dentro de sus límites y de no estar jugándose mucho en la clasificación?
Está claro que no se tiene la generación valiosa, pero en la cancha es la historia vieja de once contra once, y si se encuentran once voluntades dispuestas a jugar con toda la intensidad, agresivos de forma defensiva y ofensiva, puede ocurrir cualquier cosa.
¿Quién se imaginaba que Honduras le iba a ganar a México? Fue y le dio un baile. También Costa Rica en 2001 consiguió el “Aztecazo” a base de pura testosterona. Estos jugadores mexicanos nos demostraron que ante Chile, cuando todos pensamos que estaban llenos de esa testosterona, parecían jugadores castrados.