Genaro Ramírez, dirigente de la gremial Asociación de Empresarios de Autobuses Salvadoreños (AEAS), dijo este martes que ve «bastante complicado» que el transporte público de pasajeros circule a partir de este 21 de julio en la segunda fase de reactivación económica.
El empresario denunció que el Gobierno ni siquiera les ha presentado el protocolo sanitario que los transportistas deberán aplicar para que sus unidades vuelvan a las calles. El sector está casi inactivo desde el 7 de mayo, como medida de prevención de contagios de coronavirus (COVID-19).
Los transportistas llevan casi cuatro meses en los que sus buses y microbuses circularon a un 50 % de capacidad de pasajeros y llevan casi dos en los que no hay servicio a la población, excepto al personal sanitario que atiende la epidemia de COVID-19 en el país.
«Se aplazó (la reactivación de este sector planeada el 7 de julio) porque habían subido los contagios, ahora si pasamos de menos de 100 (casos diarios de COVID-19) a sobrepasar los 300, ¿cuál es el escenario para el 21 de julio? Yo lo veo completamente difícil», dijo en la entrevista Diálogo de Canal 21.
Posteriormente, ante los medios de comunicación, Genaro Ramírez repitió su mensaje: «Bastante complicado (reactivación) porque así como no salimos el 7, no creo que haya salida el 21, porque tampoco se han establecido los protocolos por parte de Salud, hemos insistido que cuál va a ser».
Sobre el tema de los protocolos a implementar en las unidades de transporte, aseguró que «hemos tenido reuniones y siempre preguntamos sobre el protocolo y hasta ahora no lo sabemos».
Pérdidas millonarias
Genaro Ramírez estima que el sector del transporte público de pasajeros ya perdió alrededor de $100 millones desde que se dejó de brindar un servicio completo a la población a raíz de la pandemia.
«Calculamos (que las pérdidas) que podría andar arriba de los $100 millones en todo el país. Hay más de 12,000 unidades y 8,000 empresarios que han sido afectados con esta pandemia. Es un caso fortuito pero sí nos ha impactado», lamentó.
Este rubro de la economía nacional y el principal medio de transporte de la población se suspendió desde el 7 de mayo pasado, bajo el argumento de que es una de las principales fuentes de contagio de la epidemia.
Sin embargo, otro de los dirigentes del sector de transportistas, Catalino Miranda, desmintió que fuera cierto que hubo múltiples contagios dentro de sus unidades de transporte.
“No (es cierto). Porque pudimos manejar la pandemia desde el inicio. Es una presunción, de que pueda haber un contagio (dentro de las unidades) es una presunción”, expresó el presidente de la Federación de Empresarios del Transporte (Fecoatrans), aunque no dio cifras de cuántos transportistas tienen coronavirus.
Por otro lado, Genaro Ramírez también reclamó que mientras los buseros no circulan, otros sectores informales han aprovechado a sacar beneficio, sin cumplir las medidas sanitarias.
«Es incalculable el daño que se ha ocasionado, cuatro meses… imposible seguir de esta manera, no se puede operar y por otro lado tenemos los pick-ups, camiones, microbuses sin ningún protocolo de sanidad, mientras a nosotros se nos tiene amarrados, es completamente contradictorio», manifestó esta mañana.
Sobre su propuesta para mejorar la situación económica de los buseros, Ramírez dijo que «hemos hablado de un conjunto de medidas que podrían aliviar la situación del sector, que van desde analizar la tarifa técnicamente… porque se han sacado esos 20 centavos en 2009, en vez de avanzar retrocedimos. ¿Quién puede subsistir con el mismo sueldo desde hace 20 años?».
El Salvador superó los 10,000 contagios de coronavirus, se acerca a los 300 fallecidos y tiene más de 4,100 casos activos de la enfermedad, además de otros 10,200 casos sospechosos.
La situación, en comparación a hace siete días, cuando debió reactivarse el transporte colectivo de pasajeros, es peor en cuanto a casos confirmados y fallecidos diariamente, por lo que el empresario ve con dudas una posible reapertura dentro de una semana.