Otras 69 personas fallecieron por neumonía durante la semana del 31 de mayo al 6 de junio, de acuerdo al boletín epidemiológico del Ministerio de Salud (MINSAL).
Esto no solo implica que los casos de fallecidos por esta enfermedad siguen en una clara alza, sino que la tasa de letalidad también presenta un aumento considerable respecto al año pasado.
Los decesos hasta el 6 de junio son 404, o sea 69 más que en la semana previa, cuando se contabilizaban 335 hasta el 30 de mayo pasado.
La tasa de letalidad también incrementó y pasó de 10.6 % (hasta el 30 de mayo) a un 12.2 % en el último reporte. Comparada a la de 2019, la tasa subió un 5 %.
Las cifras no solo implican aumento de muertes en las últimas semanas, sino también que la cantidad de fallecidos este año ya superó los números respecto a 2019, cuando, hasta el 6 de junio de ese año, se reportaban 378 muertos.
El MINSAL además registra que el «68% (274) de las muertes ocurren en el adulto mayor de 60 años de edad», mientras que «el grupo de edad más afectado es el menor de 5 años con las tasas (de letalidad) más altas».
Neumonías y COVID-19
Este incremento de muertes por neumonías también coincide con un reporte de más casos de coronavirus (COVID-19) y decesos por la enfermedad originada en China, aunque las autoridades sanitarias advirtieron que el repunte de enfermedades respiratorias es propio de la estación lluviosa.
A esto se agrega que los casos sospechosos de COVID-19 y que puedan fallecer con síntomas de neumonía no son prioridad en los tests de coronavirus, por lo que no se puede confirmar o descartar si fallecieron a causa de la pandemia.
En ese sentido, el alcalde de Soyapango, Juan Pablo Álvarez, reveló este jueves que solo en ese municipio han enterrado a 122 personas sospechosas de coronavirus, muchas con causa de muerte catalogada como «neumonía atípica».
A pesar de que a estos fallecidos no se les sometió a la prueba de COVID-19, el MINSAL ha pedido a alcaldías, como la de Soyapango, que entierren los cuerpos bajo los protocolos de bioseguridad del coronavirus.
Otro municipio que reporta más de un centenar de fosas utilizadas para fallecidos bajo sospecha o muerte confirmada por coronavirus es San Salvador, que hasta el 3 de junio contabilizaba 104 entierros.