El director general de la Policía Nacional Civil (PNC)), Howard Cotto, informó sobre el hallazgo en el cantón Los Hornos de San Francisco Javier, departamento de Usulután, de un cuerpo que podría ser el de la agente Carla Ayala.
“Se tiene información de que familiares de Juan José Castillo habrían participado en el enterramiento de Carla Ayala en el lugar donde ha sido encontrado la osamenta. Pruebas técnicas de ADN confirmarán que es el cuerpo de Carla Ayala”, agregó el jefe policial.
El director de la PNC aseguró que tienen «fuertes indicios» sobre que los restos humanos encontrados corresponden a la agente desaparecida tras una fiesta del extinto Grupo de Reacción Policial (GRP) realizada entre la noche del 28 de diciembre pasado y la madrugada del 29 de diciembre.
Cotto dijo que la Fiscalía General de la República ya fue notificada sobre el hallazgo y que esperan que el cuerpo sea sometido, a la brevedad posible, al análisis respectivo para confirmar que el mismo corresponda a la víctima.
«Tenemos que demostrar de forma técnica el hallazgo del cuerpo de Carla Ayala», reiteró el titular de la PNC.
Cotto insistió que la Policía nunca ha dejado de buscar el cadáver de la agente Ayala y que mantienen constante comunicación con la familia de la víctima para informarles sobre los procedimientos policiales.
El principal implicado en este caso, Juan José Castillo, aún continúa prófugo de la justicia. Otros miembros del GRP actualmente son procesados en tribunales por este crimen.
Por su parte, la Fiscalía General de la República aseguró que desde la desaparición de la agente Carla Ayala ha estado dirigiendo las investigaciones y utilizando los recursos tecnológicos disponibles para resolver el mismo.
“Los resultados de esta investigación tecnológica, han delimitado el lugar, donde pediremos la ampliación de la autorización judicial de ingreso a la propiedad. Cabe destacar que, desde semanas atrás, Fiscalía ha estado examinando diversas locaciones cercanas”, afirmó la Fiscalía en su cuenta de Twitter.
Dicha institución enfatizó que luego de llenar los requisitos de ley procederán a exhumar los restos humanos que supuestamente corresponden a Carla Ayala.
La historia del caso
La agente Carla Ayala, junto a otros compañeros de la corporación policial, acudió a una fiesta organizada por el Grupo de Reacción Policial (GRP) en las cercanías del estadio Cuscatlán. Durante la madrugada del 29 de diciembre de 2017, Juan José Castillo hirió de bala a Ayala, quien fue privada de libertad y desde entonces nadie supo algo de ella.
Las investigaciones llevaron a las autoridades hasta el cementerio general de San Francisco Javier en Usulután. Supuestamente ahí había sido enterrado el cuerpo de Carla Ayala. La PNC y Fiscalía exhumaron un cuerpo creyendo que correspondía a la víctima, pero se trataba de una anciana residente en la zona.
A inicios de junio pasado, la PNC oficializó la captura de siete policías y tres civiles, quienes fueron presentados a tribunales por la Fiscalía y acusados del delito de homicidio agravado e incumplimiento de deberes.
Los imputados fueron procesados en la audiencia inicial y el juez respectivo decidió enviarlos a prisión. Mientras tanto, otros involucrados huyeron del país para evitar ser aprehendidos por este caso.
Uno de los agente del GRP que huyó del país fue Carlos Alberto Flores Fernández, quien fue arrestado en Estados Unidos y deportado a El Salvador el 26 de junio pasado. El imputado habría colaborado para que Juan José Castillo, huyera con la víctima.
Las diligencias pasaron al Juzgado Octavo de Instrucción de San Salvador, sin embargo, el juez se declaró incompetente y trasladó las mismas a un tribunal especializado.
Las autoridades judiciales ordenaron una reconstrucción de los hechos, la cual evidenció la participación de los imputados y la facilitad que el homicida tuvo para escapar con Carla Ayala y desaparecer su cuerpo.