Kathia Alejandra Rivas Vaquero, de 15 años, originaria de Quezaltepeque, fue vista por última vez por sus familiares el pasado el domingo en un rancho de playa en La Libertad. Desde ese día sus familiares la buscan y no tienen ninguna explicación sobre lo que ocurrió.
El rancho 236, ubicado en la primera fila de la playa San Diego, tiene un amplio espacio con salida a la playa.
La familia Rivas, una habitual visitante del referido rancho, dice que la seguridad del lugar les brindaba tranquilidad.
El domingo 1 de octubre, la familia decidió arrendar el rancho. Desde la mañana, Kathia, su hermano y padre disfrutaron acompañados de dos familiares más.
“Cuando vamos, la mayor parte del tiempo ellos pasan en la piscina”, dijo un familiar.
El domingo por la tarde, Kathia, su padre y su hermano disfrutaban del agua de la piscina. Pero la joven decidió salir de la piscina. Se dirigió al vehículo que tenían estacionado en la entrada del rancho de playa para sacar otra ropa y cambiarse. Desde ese momento ya no la volvieron a ver.
“Fue hasta el carro a traer su ropa y después ya no supimos nada de ella”, narró una familiar mientras rompía en llanto. “Fue como si se la tragó la tierra”, continuó.
Uno de los factores que despierta más intriga entre sus familiares es que el rancho es una propiedad privada y se encuentra cercado por un muro perimetral, vigilado por una familia de “cuidanderos“.
“La fuimos a buscar al carro, a las cercanías y nada. Las autoridades (Policía y Fiscalía) hacen lo humanamente posible. Nadie sabe de ella”, dice un familiar.
En redes sociales se publicó la desaparición de Kathia. Los familiares anexan los números para recibir información del paradero de la menor, estos son: 7673-7190 y 2323-5241.
Los alrededores de la playa San Diego es asediada por la pandilla Mara Salvatrucha (MS-13). Algunos ranchos han sido asaltados por los delincuentes.
Hasta el momento no existe ninguna hipótesis sobre lo que le ocurrió a la joven.